Desde que La Alumbrera, la mina de cobre y oro a cielo abierto más grande de Argentina, dejó de operar a fines de 2018, no se puso en marcha ningún otro proyecto de cobre en el país. A pesar de compartir cordillera (y minerales) con Chile y Perú, que abastecen casi el 30 por ciento de mineral al mundo, Argentina cumple seis años sin producir ni exportar el mineral. Al igual que el litio, el cobre es considerado como un mineral estratégico para la transición energética, y es un recurso esencial para la industria electrónica, de energías renovables y electromovilidad.

Se espera que su demanda se  duplique hacia 2035. Entre los waivers que podrían aumentar la demanda son el reemplazo de vehículos a combustión interna por versiones eléctricas que requieren cinco veces más cobre para su producción, la masificación de energías renovables como parques solares y eólicos que requieren tres veces más cobre que las plantas de generación térmica, y  el desarrollo de nueva infraestructura que dé soporte a la creciente electrificación.

Proyección

De acuerdo a una proyección de S&P sobre el futuro del cobre a nivel mundial, su demanda plantea hipótesis de escasez. Para 2035 el faltante de cobre puede llegar a casi 10 millones de toneladas (equivalentes a unos 50 proyectos de clase mundial). Argentina cuenta con seis de 23 proyectos que existen en el país en condiciones de comenzar su construcción en el corto y mediano plazo. De acuerdo a la Cámara Argentina de Empresarios Mineros (CAEM), puestos en marcha alcanzarían un nivel promedio de 1066 miles de toneladas por año (equivalente a 10 por ciento del déficit global de cobre en 2035). . 

Esta proyección ubicaría al país como el sexto productor mundial de cobre, detrás de Chile (que produjo 5.200.000 de toneladas de cobre en 2023), Perú y Congo (2.200.000 toneladas cada uno), China (1.900.000 toneladas) y Estados Unidos (1.300.000 toneladas). 

En Argentina CAEM calcula que, en base a información pública de los proyectos y suministrada por las propias empresas a cargo, las primeras exportaciones de cobre podrían realizarse en 2027 con el período de obras y maduración de las inversiones necesarias. Ese año, el país podría exportar 317 millones de dólares en cobre, cifra que se cuadruplicaría a medida que comiencen a funcionar los proyectos que hoy se encuentran en etapas preoperativas. "Hacia 2035, alcanzarían 8341 millones de dólares, lo que para el país significaría un incremento de 10 por ciento en el valor de sus exportaciones 2022", aseguran desde la Cámara. Como referencia, el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) informó que en todo 2023 las exportaciones de carbono de litio representaron 807 millones de dólares.

Además de las exportaciones, CAEM proyecta que estos seis proyectos implicarían desembolsos de capital por al menos 20 mil millones de dólares y generarían  entre 30.000 y 43.000 nuevos puestos de trabajo desde 2027. Esto significaría un crecimiento de 30 y 40 por ciento del empleo minero actual.

Proyectos

"El cobre es el gran objetivo de esta gestión", había titulado la entonces secretaria de Minería, Flavia Royón, durante un acto en San Juan pocos días antes de que Javier Milei pidiera su renuncia. Con el puesto aún vacante, existen al menos seis proyectos de cobre de clase mundial avanzados que deberá atender el o la próxima funcionaria que ocupe ese asiento tan crucial para la generación de divisas del país. 

Josemaría es el más próximo a iniciarse. De acuerdo a CAEM, cámara a la que la empresa forma parte, su construcción se iniciará en 2024. Propiedad de la canadiense Lunding Mining, se encuentra en el departamento Iglesia en el extremo noroeste de la provincia de San Juan, donde se ubican tres de los seis más avanzados del país. El inicio de operaciones fue en 2002 y su costo de capital es de 4.000 millones de dólares. El proyecto prevé producir 136.000 toneladas anuales de cobre (además de oro y plata) y generar unos 4000 puestos de trabajo en la construcción y unos 1000 en la operación, con una vida útil de, al menos, 19 años.

En 2025 está previsto que comience a construirse Taca-Taca, ubicado a unos 35 kilómetros hacia el oeste de la localidad de Tolar Grande en Salta. Taca Taca esta posicionado como uno de los diez proyectos más grandes del mundo, según sus recursos. Tiene una inversión estimada de 3583 millones de dólares y podría producir 244.000 ton/año de concentrado de cobre, además de oro y molibdeno concentrado. Operado por otra canadiente First Quantum Mineral y su subsidiaria local Corriente Argentina, el proyecto se encuentra en etapa de factibilidad.

San Jorge se encuentra aún en etapa de prefactibilidad de acuerdo a la información de Minería, pero CAEM asegura que comenzaría la construcción en 2025. Ubicado en la localidad de Las Heras en Mendoza, requiere una inversión de 462 millones de dólares.

El siguiente proyecto que comenzaría a construirse según CAEM es Los Azules, en San Juan. Operada por la minera canadiense McEwen Mining, prevé comenzar su construcción en 2026. Tiene una inversión estimada de 2462 millones de dólares y podría producir 146.057 toneladas de cátodos de cobre a lo largo de 27 años de vida útil de la mina. De acuerdo a la Secretaría de Minería, se encuentra en la etapa de evaluación económica preliminar. 

El Pachón, también ubicado en San Juan, podría comenzar a construirse en 2027. Operado por la minera suiza Glencore, es la que mayor inversión requiere: 6000 millones de dólares según CAEM. La minera se encuentra actualmente trabajando en etapa de estudio de factibilidad del proyecto y en la realización del Informe de Impacto Ambiental que será sometido a consideración de las autoridades. El Proyecto consiste en el desarrollo de una mina a cielo abierto para extraer cobre y molibdeno, y procesarlo mediante flotación. Sumado a Los Azules y Taca Taca, representan el 66 por ciento de los recursos y reservas totales de cobre de Argentina. Su construcción y puesta en marcha demandarán más de 12000 millones de dólares, más de la mitad de la inversión total proyectada para los seis proyectos (19.200 millones de dólares).

La lista la completa el proyecto Minera Agua Rica Alumbrera (Mara), en etapa de prefactibilidad, que se plantea en Catamarca como un empalme con el cierre de Bajo de la Alumbrera y que podría aprovechar la infraestructura existente asociada con la ex mina, hoy en desuso, para su desarrollo y operación.  Su construcción podría iniciar en 2027 y demandará una inversión total de 2700 millones de dólares.