Autoridades colombianas anunciaron que abrirán un corredor humanitario en la zona rural de Segovia para asistir a unas 800 familias que se encuentran confinadas o desplazadas por los enfrentamientos armados entre el Ejército y el Clan del Golfo que suceden desde el 7 de febrero.

"La agudización de los combates desencadenó una crisis humanitaria. Los derechos fundamentales a la libre movilidad, a la salud y a la alimentación de los moradores de esa zona del nordeste antioqueño están siendo vulnerados, ya que hay escasez de alimentos, combustibles y medicinas", informó la Defensoría del Pueblo, uno de los entes que participará en esta iniciativa.

El corredor humanitario se abrirá en este municipio del departamento de Antioquia "próximamente" con la participación de las entidades nacionales y departamentales y los cooperantes internacionales para ayudar a las familias confinadas "que están requiriendo con urgencia”, aseguró el defensor del pueblo, Carlos Camargo.

En esta zona los vecinos permanecen en sus casas sin poder salir por el miedo a los enfrentamientos. "Son cinco o seis familias las que a diario llegan, con dificultades, al casco urbano de Segovia y a otros lugares, como el Bajo Cauca antioqueño y el sur de Bolívar", manifestó Camargo.

Además, hubo al menos una persona herida por una mina antipersonal en Los Aguacates. La semana pasada un soldado del Ejército murió al activarse uno de estos artefactos explosivos.

También han muerto otros cuatro militares en los enfrentamientos de la pasada semana contra el Clan del Golfo, también denominado Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC), al intentar recuperar el control que tiene este grupo en el nordeste antioqueño.