El ministro de Salud bonaerense, Nicolás Kreplak, le contestó al Gobierno nacional y cargó contra el vocero de Javier Milei, Manuel Adorni, quien aseguró esta semana que la invasión de mosquitos que sacude al país es “del gobierno anterior”. 

Consultado por AM750 sobre esta insólita afirmación que llevó a todos los medios a hablar de “mosquitos K”, afirmó que “lo que dijo el otro día el vocero tenía varios problemas, además de intentar chicanear con la salud”.

Tras aclarar que el país vive su “peor epidemia de dengue de su historia”, y advertir que el brote durará, por lo menos, hasta otoño, aclaró: “Siempre el peor momento es para finales de marzo. Ahora vemos bastantes fallecidos en mitades de febrero. Tenemos por delante un tema muy serio”.

Por eso, se lamentó: “Un responsable de comunicación no puede mezclar todo solo con intenciones de chicanear políticamente. O al menos que se instruya. Que llame a alguien que sepa. Hay fallecidos por el dengue. Tenemos por delante un tema muy serio”.

“En cualquier lugar normal, un responsable de comunicación gubernamental que confunda un episodio de un mosquito que es molesto, pero que no transmite enfermedades, con una epidemia gravísima que cuesta vidas debería dejar el puesto o entender que están gobernando y no se pueden hacer chistes con la salud de la gente”, añadió.

Además de estas durísimas críticas al vocero, Kreplak denunció que como parte de las desprolijas políticas del Gobierno nacional, se “suspendió la pauta publicitaria” bajo el pretexto de que “era algo de uso político”.

De todos modos, como quien dice lo obvio, aclaró: “Pero, por ejemplo, hay que educar para la salud. Los únicos que estamos diciendo que hay que descacharrar es la Provincia. Eso es para ponerse a trabajar y hablar en serio”.

Finalmente, y muy vinculado con este tema, denunció que en este contexto –y como si un brote histórico de dengue no fuera una alerta suficiente– el Gobierno nacional todavía no atendió el llamado de la Provincia de Buenos Aires, donde vive el 40 por ciento de la población, ni convocó a las provincias para armar un plan sanitario en conjunto.

“Todavía no tuvimos comunicación con el ministro de Salud, Mario Antonio Russo. Hablamos de manera telefónica intentando arreglar alguna cita. Pero, más allá de una reunión conmigo, más importante aún es que haya un Consejo Federal de Salud donde todos los ministros nos encontremos y sepamos cuál iba a ser la estrategia para abordar el dengue”, alertó.

Y finalizó: “No ha habido. Cuando yo estuve en el ministerio nacional teníamos planes mucho tiempo antes y que se monitoreaban. Con el Gobierno anterior tuvimos discusiones hasta el último Cofesa sobre cómo abordar el dengue y la verdad es que estamos esperándolo. Es indispensable”