El camarista Eduardo Freiler, suspendido por el Consejo de la Magistratura, acusado por mal desempeño y enriquecimiento ilícito, comenzó ayer a ser enjuiciado en una audiencia en la cual sus acusadores pidieron su remoción y la defensa advirtió que “es posible defender a un acusado, pero no es posible defender a un condenado”. José María Olivares, abogado del camarista, reclamó que se realice “un peritaje por expertos” sobre el patrimonio del juez. “Comprendo que en el afán de incriminar se busquen imputaciones por demás. No consiento el sistema almacenero, avasallante y arbitrario con el que se determinó un desbalance financiero”, detalló el letrado ante el Jury de Enjuiciamiento.
El defensor consideró que “a Freiler no se lo ha atacado como juez” sino que “se lo ha denostado como persona” y a través de los medios “se instaló una imagen peyorativa sin ninguna necesidad.” Un rato antes, el diputado del PRO Pablo Tonelli y el vicepresidente del Consejo de la Magistratura, Miguel Piedecasas, como acusadores, habían hecho un repaso de los bienes que se le atribuyen al camarista y habían advertido que no puede justificar unos 16 millones de pesos.
