El padre del realismo delirante repetía su propio mantra: “Un texto tiene que durar lo que tiene que durar”. Alberto Laiseca (1941-2016), “Lai” para las escritoras y escritores que se forjaron en su taller, auscultaba la respiración de cada palabra y le daba el tiempo y el formato que en silencio le sugería. El autor de Los Soria, la novela que ostenta el récord de ser la más extensa de la literatura argentina, es también un cuentista eximio que construye con destreza formatos breves.
La nueva versión de Cuentos completos, publicado por Random House, con prólogo de Leo Oyola y edición al cuidado de Sebastián Pandolfelli, uno de sus discípulos dilectos, incluye los cuentos de los libros Matando enanos a garrotazos (1982), Gracias Chanchúbelo (2000), En sueños he llorado (2001) más los “Cuentos reunidos” --los que se publicaron como inéditos en la primera versión que hizo Gastón Gallo para Simurg en 2011-- y diez relatos inéditos.
"Siempre es posible que entre la montaña de papeles desordenados aparezca un nuevo relato, algún cuento que desconocíamos, o quizá sea el propio Lai quien los envíe desde el astral", dice Pandolfelli en la introducción.