El Gobierno de Javier Milei redujo a mediante un Decreto de Necesidad y Urgencia el tope de ingresos para poder acceder a las Asignaciones Familiares. Por AM750 Roxana Mazzola, especialista en políticas sociales y reducción de desigualdades, explicó que esta medida podría afectar a un millón y medio de familias.
En concreto, el Ejecutivo modificó una ley de marzo 2023 donde se había igualado el tope de ingresos de las Asignaciones Familiares, donde, por ejemplo, está la Asignación Universal por Hijo y la Ayuda Escolar Anual, con el piso del Impuesto a las Ganancias.
Ahora el piso será considerablemente menor, en un contexto de altísima inflación. A través del decreto 194/2024, el Gobierno redujo el límite de ingresos establecido de $1.980.000 a $1.077.403. En tanto, el tope máximo familiar pasó de $3.960.000 a $2.154.806.
Además de modificar los topes, el DNU derogó el artículo 6° de la ley 27.160 que no permitía a un mismo titular recibir prestaciones del régimen de asignaciones familiares y a la vez aplicar la deducción especial por hijo o cónyuge prevista en el Impuesto a las Ganancias.
Consultada por esta decisión, Mazzola explicó: “Hay que ver bien los cálculos. Esto va a terminar afectando a un millón y medio de trabajadores. El tope máximo familiar también se redujo. Si hoy cubrís a más de 10 millones de hogares con esta prestación, va a haber cerca de un millón y medio fuera de esta medida”.
Para la especialista, este tipo de medidas son típicas en los gobiernos neoliberales: “Lo que hacen es asistencializar todos los derechos. Los derechos de millones de trabajadores comienzan a tener un carácter de caso extremo. Pero no como una garantía de seguridad social en la niñez”.