La motosierra que Javier Milei exhibió durante su campaña presidencial sigue encendida y uno de sus principales objetivos son los subsidios a las tarifas de luz y gas. En busca de restringir al máximo el acceso, el gobierno adelantó las nuevas condiciones que pondrá para acceder a los mismos: no permitirá que accedan aquellos que hayan comprado dólares o cualquier moneda extranjera en los últimos tres meses ; quienes tengan una prepaga no laboral; tampoco quienes hayan viajado más de una vez al exterior no limítrofe con Argentina en los últimos cinco años; y a quienes pagan en telefonía celular el equivalente a más del 25 por ciento de un salario mínimo que, desde marzo, será de 50.700 pesos sobre los 202.800 pesos.
El plan se presentó en un documento elaborado por la Secretaría de Energía de la Nación de cara a la audiencia pública del jueves 29 de febrero próximo convocada para la redeterminación de la estructura de subsidios vigentes. Los equipos técnicos de Eduardo Rodríguez Chirillo estudian la alternativas para seguir restringiendo el acceso a los subsidios de tarifas en un contexto de aumento de las mismas.
En la actualidad, tras la implementación del Registro de Acceso a los Subsidios a la Energía (RASE) a mediados de 2022, el principal criterio de asignación de subsidios es el ingreso. Además, existe una restricción patrimonial: pueden acceder a los subsidios quienes tienen como máximo dos inmuebles a su nombre y un vehículo.
La Secretaría que conduce Eduardo Rodriguez Chirihillo había adelantado que utilizaría la próxima audiencia pública del jueves a las 10:00 para avanzar en un nuevo mecanismo de distribución de subsidios basado en la conformación de una Canasta Básica Energética (CBE). La propuesta oficial prevé determinar los ingresos totales del grupo conviviente y subsidiar únicamente a aquellas familias cuyo costo del CBE exceda el 10 por ciento del ingreso conjunto, tomando en consideración también a otros parámetros como las zonas climáticas del país.
Los criterios
A dos días de la audiencia no vinculante, los documentos que la Secretaría publicó en su página web agregaron más información sobre la propuesta, que incluye nuevos criterios de exclusión a los subsidios si alguno de los integrantes del grupo conviviente presenta:
- Titularidad de una aeronave.
- Titularidad de embarcación de lujo o con fines recreativos.
- Titularidad total de dos o más inmuebles.
- Titularidad de al menos un automóvil con una antigüedad inferior a 5 años o dos automóviles con una antigüedad menor a 10 años.
- Titularidad de al menos un automóvil de lujo o colección independientemente de la antigüedad que registra.
- Titularidad de medicina prepaga no vinculada a empleo en relación de dependencia (total o por derivación).
- Más de una salida a países no limítrofes en los últimos 5 años.
- Pertenencia al directorio o ser propietario de una empresa privada (IGJ).
- Consumos en tarjeta de crédito superiores a cinco Salarios Mínimos Vitales y Móviles (SMVM), es decir de 1.014.000 de pesos desde marzo.
- Compra de moneda extranjera en al menos uno de los últimos tres meses.
- Consumos en billeteras virtuales superiores a cinco Salarios Mínimos Vitales y Móviles (SMVM).
- Consumos en telefonía móvil superiores al 25 por ciento del Salario Mínimo Vital y Móvil (SMVM), de 50.700 pesos desde marzo sobre el monto que estará actualizado a 202.800 pesos.
El esquema actual
El esquema de segmentación de subsidios que aplicó el Gobierno anterior desde finales de 2022 contemplaba tres niveles: N1 altos ingresos, N2 bajos ingresos y N3 ingresos medios. Los usuarios cuyos ingresos superaran 3,5 veces la Canasta Básica Total del Indec (2.088.880,5 pesos en enero), que mide la línea de pobreza para una familia tipo de cuatro integrantes, son catalogados como N1 y no reciben subvención.
También están excluidos los hogares ubicados en el partido de Patagones (Buenos Aires), Chubut, La Pampa, Neuquén, Río Negro, Santa Cruz o Tierra del Fuego, A. e IAS, que superen los 2.548.434,89 pesos mensuales en ingresos. A eso se suman quienes posean tres o más vehículos con una antigüedad menor a cinco años, tres o más inmuebles, una embarcación, una aeronave de lujo o sean titulares de activos societarios que demuestren una capacidad económica plena. Tampoco tienen la posibilidad de acceder al Mercado Único Libre de Cambios para comprar dólares.
El objetivo del ministro de Economía, Luis Caputo, continúa centrado en la necesidad de recortar el gasto en subsidios. Para el año 2023, el volumen de estas erogaciones alcanzó el 2,1por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), contribuyendo el sector energético con 1,6 puntos porcentuales, lo que representa aproximadamente 9683 millones de dólares, de acuerdo a estimaciones realizadas por el Fondo Monetario Internacional (FMI) y la consultora Economía & Energía. Se ha establecido como objetivo para el año 2024 reducir estos subsidios a un 1,3 por ciento del PIB en términos generales, y a un 1,1 por ciento específicamente en el ámbito energético.