En otro gesto de provocación por la provocación misma, el vocero presidencial Manuel Adorni dijo haberse puesto feliz de que haya “desaparecido” el programa que las Madres de Plaza de Mayo tenían en la TV Pública.
La intencional expresión que alude a la desaparición de personas durante la última dictadura cívico militar —que varios funcionarios del gobierno de La Libertad Avanza (LLA) reivindicaron desde su creación como fuerza política— es una mueca de cinismo que en 40 años de democracia ningún funcionario de la órbita más cercana a un presidente de la Nación había manifestado públicamente ni como chiste ni como jactancia ni como ironía ni como celebración.
“A mí me parece sensacional que esto haya desaparecido”, dijo el vocero durante una entrevista por TN en la que fue consultado acerca de la decisión del Gobierno de dar de baja de la programación del canal estatal al ciclo “Madres de la Plaza”, tras 16 años ininterrumpidos en pantalla.
Con la arrogancia que lo caracteriza en cada aparición pública, Adorni no solo se ufanó de haber sido él quien dio a conocer esa noticia sino que confesó haberse puesto “muy feliz” por esa decisión con la que, en su opinión, el gobierno de LLA “empezó a desarmar parte de la vieja política”.
“Pensá que este tipo de programación la sostienen los mismos pobres y los mismos indigentes que con sus impuestos, directa o indirectamente, pagan este tipo de producciones”, añadió haciendo uso del viejo apotegma con que los gobiernos conservadores suelen mezclar todo con todo para justificar una censura, un recorte, un ajuste.
Luego de decir eso, Adorni remató su festejo con la cuestionable frase final (“así que a mí me parece sensacional que esto haya desaparecido”) que sobrepasa todos los límites éticos, de respeto y de conmiseración por las víctimas de la dictadura más sangrienta de la historia argentina que, en plena vigencia, creó el eufemismo de “desaparecido” para referirse a las víctimas de detenciones ilegales, torturas, asesinatos, ocultamiento de cuerpos para que no sean materia probatoria y demás métodos aberrantes de crímenes configurados internacionalmente como delitos de lesa humanidad.
El programa “Madres de la Plaza” producido por la Asociación Madres de Plaza de Mayo emitió su último programa el 26 de febrero pasado. La organización que encabezó Habe de Bonafini calificó a esa medida como "injusta e intempestiva".
"Lamentamos el grosero error de cálculo de
Milei: si piensa que por sacarnos del aire acabará con nuestra lucha, se
equivoca largamente", expresaron en un comunicado en el que aseguraron que
igualmente “seguiremos en la Plaza de Mayo".
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