En el lanzamiento de su edición de este año, la trigésimo sexta, la Bienal de Escultura Chaco vendrá con un plus: el emplazamiento del gemelo digital del “David” de Miguel Ángel. El acontecimiento será el miércoles 6 de marzo –justamente el Día del Escultor, dado por el nacimiento del artista renacentista italiano- a las 19.30, en el Parque Nacional de las Esculturas de Resistencia, donde se realiza la tradicional y multitudinaria Bienal. El singular “David” convivirá entonces con todos los primeros premios de las bienales anteriores, en esa especie de “museo al aire libre” que embellece la ciudad. Además, será el único “David” ubicado a cielo abierto en el espacio público argentino y probablemente -según señala Josese Eidman, presidente de la Fundación Urunday, que organiza el Encuentro- el primer calco digital emplazado en el mundo.
“Traer el 'David' a la ciudad de las esculturas fue un sueño que abrazaba fuertemente Fabriciano Gómez (creador de la Bienal, fallecido en 2001). Él solía decir a menudo que si el 'David' estuviera aquí, no habría necesidad de viajar a Europa para disfrutarlo o aprender de él, y lo que hicimos fue efectivamente completar su sueño, a través de un proyecto que resultó muy desafiante”.
El emplazamiento del singular “David” fue posible gracias tanto al apoyo de la Universidad Nacional de las Artes, que autorizó su reproducción, y del Museo de la Cárcova, como al trabajo de las artistas Gisela Kraisman y Denise Di Federico. “La escultura fue realizada a partir de la aplicación de tecnología 3D, a través de un escaneo de alta resolución que obtuvo el 'gemelo digital' de la obra, para luego imprimir su molde, hacer el vaciado con materiales aptos para la intemperie y finalmente obtener la réplica en tamaño natural”, explica Eidman.
Más allá de la instalación de la escultura clásica de Miguel Ángel, la Bienal de este año seguirá su curso habitual. En este sentido, ya recibió postulaciones de 157 escultores oriundos de 55 países, de los cuales diez fueron elegidos para participar de la nueva edición, que tendrá lugar entre el 13 y el 21 de julio próximos. Sus nombres y países de origen serán revelados luego de la inauguración de la escultura renacentista, al igual que los detalles al fino sobre el Premio Desafío -otro clásico del Encuentro-, del que participan estudiantes avanzados de escuelas de arte del país. “Sabemos que transcurren tiempos difíciles para el arte y la cultura, por eso esta edición será especial… Estamos confiados en que, pese a este contexto económico complejo, la Bienal volverá a convocar a los 'del palo' de las artes y al turismo cultural”, se entusiasma el heredero de Fabriciano.
Otra arista de la jornada previa a la Bienal consistirá en la presentación del programa complementario de la inminente edición, que incluye varias de las dimensiones presentes en el evento: la de artesanías, la académica, la escénica, la musical y la ferial. “Haber construido un acontecimiento respetado y reconocido en la escena escultórica internacional, es motivo de enorme orgullo”, sostiene Josese, en clave de racconto histórico. “Treinta y seis años pasaron desde aquel primer concurso de escultura al aire libre en la plaza central de la ciudad que hoy, en su formato Bienal, está catalogada entre las más importantes del mundo, porque se define por una variedad de experiencias artísticas, académicas y recreativas, que armoniosamente se entrecruzan y conviven. Es una conexión muy potente, de la gente, del arte y la naturaleza que además implica en un motor de desarrollo”.