Bajo la consigna "El hambre no espera, basta de ajuste", y mostrando ollas vacías, organizaciones sociales independientes y de distintos sectores políticos anunciaron un nuevo plan de lucha "contra las políticas del Gobierno": prevén movilizarse el 8 de marzo en el Día Internacional de la Mujer y realizar una jornada de protesta el martes 12 con manifestaciones en distintos puntos del país que incluirán cortes de calles y rutas.
"Hemos reafirmado el camino de unidad producto del avance de una campaña de persecución y de estigmatización contra los trabajadores de la economía popular. Este Gobierno ha decidido aplicar políticas de ajuste contra el pueblo, terminando con las obras en los barrios populares y sacando los alimentos de los comedores comunitarios", dijo el secretario general de la Unión de Trabajadores y Trabajadoras de la Economía Popular (UTEP), Alejandro "Peluca" Gramajo. "Bajo ningún punto de vista vamos a permitir que el Gobierno avance sobre los derechos de los más humildes, como la finalización del Programa Potenciar Trabajo. Y, frente a este panorama, el 8 de marzo vamos a movilizar en la marcha nacional de las mujeres y para el día 12 estamos organizando una gran jornada de lucha en todo el país".
Dirigentes de la UTEP, la Unidad Piquetera (UP), el Frente de Organizaciones en Lucha (FOL), el Bloque Piquetero Nacional, el Bloque de Organizaciones en lucha, La Poderosa y muchos otros movimientos sociales, anunciaron las próximas medidas con una conferencia de prensa en el Obelisco, en el centro porteño.
"Estamos dando continuidad a los reclamos ante un gobierno nacional que tiene de rehén el alimento de cientos de miles de personas del país. Estamos denunciando que con la comida no se juega, y ante esta situación crítica, no vamos a tolerar el avasallamiento con el que se pretende terminar de desintegrar el tejido social que cada día las organizaciones sostenemos en los territorios", dijo Sabrina Roldán, del Frente Popular Darío Santillán (FPDS).
Del encuentro también participaron dirigentes de Libres del Sur, la Corriente Clasista y Combativa (CCC); el Frente Nacional Territorial (FeNat CTA-A); la Coordinadora por el Cambio Social; el Frente Barrial CTA-T, el Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST), el Frente Milagro Sala, la Organización Barrial Tupac Amaru y la Federación de Trabajadores de la Economía Social (Fetraes). Asimismo, estuvieron presentes responsables del Movimiento Argentina Rebelde; el Movimiento por la Unidad Latinoamericana y el Cambio Social (Mulcs), el Movimiento 8 de Abril; el FAR y Copa Marabunta; la Federación de Organizaciones de Base (FOB); el Frente Popular Darío Santillán Corriente Plurinacional; el MTD y el MTR por la Democracia Directa. También se sumaron el Frente de Lucha Piquetero y sus organizaciones, Polo Obrero (PO); MTR Votamos Luchar; el CUBA-MTR/MIDO; la Agrupación Armando Conciencia; MTL Rebelde; el Frente de la Resistencia; Rebelión Popular; Pueblo Libres; la organización William Cooke; Soy Acción Revolucionaria; Movimiento de Lucha y Mujeres en Lucha, son todas las organizaciones convocantes a la protesta.
"Estamos denunciando el abandono total a los comedores populares y que no llega un kilo de alimentos a nuestros comedores y merenderos", dijo Eduardo Belliboni, referente del Polo Obrero. Para Damaris Rolón del FOL en la Coordinadora por el Cambio Social, "la reestructuración del Programa Potenciar Trabajo hará daño a más de 400 mil personas mayores de 50 años y madres de más de cuatro hijos". Sandra Vila, referente del Movimiento Territorial Liberación (MTL-Rebelde), señaló que el Gobierno "tiene un proyecto de entrega y saqueo, en beneficios de las grandes multinacionales, de los extractivistas, de los sojeros y no tiene un proyecto de desarrollo nacional".
"Esta conferencia confirma el proceso de unidad de los movimientos sociales -dijo finalmente Ramiro "Vasco" Berdesegar, coordinador bonaerense de la CCC-, y reafirma nuestra decisión de luchar frente a un Gobierno que en 80 días aplica tarifazos, permite el aumentazo de los alimentos, sus políticas de ajuste provocan desocupación y millones de argentinos abandonados sin alimentos ni medicamentos."