“Paro, paro, paro. Paro general”. El canto comenzó a escucharse pasadas las 19.30 en la esquina de Santa Fe y Buenos Aires de la plaza 25 de mayo. En esa zona de la ciudad distintas agrupaciones estudiantiles, secundarias, terciarias y universitarias, convocaron a un cacerolazo para denunciar las políticas de ajuste del gobierno de Javier Milei, en el marco de la apertura de sesiones ordinarias del Congreso. “El presupuesto que hay para la educación pública, particularmente para la Universidad, es paupérrimo y por lo que sabemos alcanza hasta abril”, denunció Lautaro Habibi, estudiante de la Facultad de Humanidades y Artes y militante de Enclave Roja en el FITU, en diálogo con Rosario/12. En tanto, Arlene Racca, copresidenta del Centro de Estudiantes del Olga Cossettini, se refirió a las dificultades que encuentran los estudiantes para sostener los estudios y consideró que muchos “van a quedar excluidos de la posibilidad de acceder a la educación”. En sintonía con la movida estudiantil hubo asambleas y ruidazos en distintos puntos de la ciudad.
La convocatoria estudiantil comenzó pasadas las 19.30 en la plaza 25 de Mayo. La intención de la jornada fue manifestar el descontento del movimiento estudiantil con la política educativa de Javier Milei, en el marco del inicio del período de sesiones ordinarias del Congreso. Allí se reunieron organizaciones estudiantiles de los niveles secundarios, terciarios y universitarios. Según adelantaron, será la primera de muchas acciones que tienen previstas las organizaciones estudiantiles que llamaron a todos los centros de estudiantes de la ciudad a sumarse al reclamo.
Pero también hubo convocatorias en distintos puntos de la ciudad. Bajo la consigna “Basta de ajuste y no al DNU”, asambleas de vecinos convocaban a diversos cacerolazos en múltiples puntos de la ciudad. Los encuentros se dieron en Fisherton industrial (Juan José Paso y Donado); barrio Belgrano (Mendoza y Provincias Unidas); Echesortu (Mendoza y Avellaneda); Plaza Alberdi; barrio Agote y Pichincha (Córdoba y Veramujica); Tablada (Ayolas y San Martín); y en Arijón y Ayacucho.
“Para nosotros era muy importante convocar hoy, en consonancia con el inicio de sesiones del Congreso y que en el centro haya una acción estudiantil en rechazo a la política educativa de este gobierno”, señaló Habibi, en diálogo con este medio. “Somos estudiantes secundarios, terciarios y universitarios que nos estamos convocando. Si bien se pudo tumbar la nefasta ley ómnibus, aún queda vigente el DNU y creemos que importante manifestar nuestro rechazo y que la sociedad se exprese al respecto”, agregó.
Uno de los principales reclamos que tuvo la jornada estudiantil tuvo que ver con el rechazo al congelamiento presupuestario para las universidades. “El presupuesto que hay para la educación pública, particularmente para la Universidad, es paupérrimo y por lo que sabemos alcanza hasta abril”, sostuvo al mismo tiempo que se refirió a los diversos reclamos docentes que se vienen dando en la provincia: “Venimos acompañando también el reclamo de los docentes, porque el gobierno provincial les está dando una miseria”.
Habibi también señaló que los estudiantes vienen sufriendo el ajuste del gobierno nacional y cuestionó la quita de las becas Progresar, así como también el aumento de la tarifa de colectivo, que pasará a valer 700 pesos a partir de la próxima semana. “Poder estudiar va a ser imposible. Está todo muy complicado y para nosotros es muy importante que sea una primera acción de muchas que se van a dar en el transcurso del año porque es insostenible vivir. Está todo excesivamente caro”, evaluó y añadió: “El gobierno dice que va a atacar a la casta, pero parece que la casta somos los que estudiamos en la educación pública, los que nos manejamos en bondi o laburamos. Sabemos que no se viene nada bueno en materia educativa”.
Por su parte, Racca, manifestó que el objetivo de la medida es poder expresar la disconformidad y el descontento “por todos los ataques que viene recibiendo la educación pública” desde el inicio de la gestión de Milei. “Nos sentimos interpelados directamente porque muchos de los estudiantes no van a poder continuar estudiando. Y creemos que es importante no quedarnos de brazos cruzados, salir a la calle, y en esa lógica se inscribe este ruidazo”, explicó en diálogo con Rosario/12.
Previo al cacerolazo, las organizaciones también realizaron una asamblea para definir los pasos a seguir como movimiento estudiantil. “La intención es seguir sosteniendo las asambleas en los lugares de estudios y manifestando nuestra bronca contra los ataques a la educación”, expresó la referente del Olga Cossettini. Y agregó: “Por eso convocamos a todas las organizaciones estudiantiles para seguir siendo muchas más y pensar acciones en conjunto. Sabemos que esta situación de crisis afecta a todas las familias y vecinos”.
Respecto a las expectativas en materia educativa, la dirigente consideró que el panorama que avizoran no es nada bueno: “Si analizamos las medidas que se vienen tomando, lo que se espera es más ajuste, menos salarios para los docentes y menos presupuesto para los establecimientos. Sabemos que se vienen más recortes y queremos tomar medidas que estén a la altura de las circunstancias para expresar que no lo vamos a dejar pasar así nomás”.
De la convocatoria también participó el referente del Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS) de Rosario, Octavio Crivaro, quien cuestionó la “quietud” de la dirigencia política y las centrales obreras, frente al ajuste que propone el gobierno nacional. “Es muy auspicioso ver que diferentes asambleas hagan cacerolazos en sus barrios, al igual que esta acción del movimiento estudiantil. En una situación que es crítica para la educación y las universidades particularmente”, expresó y agregó: “Nuestra responsabilidad como movimiento de izquierda es demostrar que a este gobierno se lo puede enfrentar. Y reclamar a los que tienen responsabilidad, y el peso para hacerlo, que salgan a las calles y se pongan al frente”.
