N. viene denunciando a su exmarido, J. R., por violencia de género física, psicológica y económica desde 2021, en Cafayate. Sin embargo, el martes último quedó detenida en la Alcaidía General, después de que este hombre la golpeara. Según contó, ese día le tomaron una denuncia sólo a él, mientras que a ella le impidieron denunciar.
El abogado Álvaro Arias, coordinador del Centro Comunitario para el Acceso a la Justicia (ALFA), pidió la libertad de la mujer y sobre la base de su testimonio, radicó una denuncia.
Arias intervino ante un pedido de la organización Madres Protectoras Salta. En Cafayate, donde residía, la detenida tenía otro abogado que la representaba en cuestiones civiles y que no tomó intervención cuando la detuvieron, asunto que es del fuero penal.
Arias pudo ver a la mujer el viernes último, cuando ya se encontraba en la Alcaidía General de la ciudad de Salta. "Tenía moretones por todos lados", dijo a Salta/12. Contó que la mujer le relató que su expareja, y progenitor de dos niños en común de siete años de edad, la golpeó y luego la denunció como si ella lo hubiera hecho. Y cuando ella trató de hacer la denuncia, ni la policía ni la fiscala Sandra Rojas quisieron recibírsela. Además, el agresor se habría llevado a los niños y la madre expresó preocupación porque no sabe nada de sus hijos.
El abogado Alvaro Arias presentó un pedido de libertad en el Juzgado de Garantías 5, que interviene en el caso. Contó que allí solicitó que le tomaran la denuncia a N. por violencia de género, y aunque le dijeron que iban a tramitar que alguien de la fiscalía de Derechos Humanos fuera a verla, cuando debe intervenir una fiscalía penal especializada en Violencia Familiar y de Género, hasta ahora no fue nadie.
Por eso, en la segunda visita a N. en la Alcaidía, el letrado escuchó su testimonio e hizo él la denuncia. "Me refirió haber sido detenida por una denuncia del señor J. F.R. , a partir de lo cual se la acusó de violación de domicilio, lesiones, desobediencia judicial y daños, en ocasión en que ella fue al domicilio" de este hombre el 25 de febrero, "a buscar a sus hijos (respecto de quien ostenta la custodia legal), en la localidad de Cafayate", señaló en su denuncia de Arias.
El abogado planteó que N. "refiere que la realidad de lo sucedido fue que el mismo denunciante fue quien la agredió, golpeándola en diversas partes del cuerpo y haciéndola romper un vidrio con la cabeza, para luego pisarle la mano mientras estaba tirada en el piso".
También recordó que la mujer le refirió que solo se le tomó la denuncia al hombre, "receptándose sólo su versión de los hechos", mientras que en su caso la policía no le tomó la denuncia "a pesar del estado en el que se encontraba". "Incluso habiéndose entrevistado con la Ffiscal Sandra Rojas, esta no quiso tomarle la denuncia, sino que directamente pidió su detención", sostuvo el abogado en la presentación legal.
N. dio cuenta de que ya había una mala relación previa con la fiscala Rojas a raíz de publicaciones suyas en las que criticó el desempeño de la fiscala. Incluso días antes la había denunciado por incumplimiento de sus deberes de funcionaria pública.
El abogado recalcó que "habiendo transcurrido casi una semana desde la detención", N. todavía no ha podido realizar la correspondiente denuncia por violencia de género.
"Pude observar que presentaba moretones en diversas partes del cuerpo y no podía mover bien una de sus muñecas, ostentando cortes en la parte baja de sus piernas", añadió el abogado en su denuncia, en la que destacó que "el transcurso del tiempo puede hacer desaparecer las lesiones" por lo que con más razón "debería habérsele permitido denunciar y remitir las actuaciones a la Fiscalía de Violencia Familiar y de Género de manera oportuna". Es más, "deberían haberse iniciado de oficio las acciones para investigar los hechos de violencia de género".
Asimismo, el letrado sostuvo que "mayor diligencia y cuidado debería haberse tomado por parte de las autoridades intervinientes" cuanto era de público conocimiento la existencia de denuncias previas realizadas por parte de la víctima.
En 2021, se hizo público que J.F.R. había golpeado a la mujer y en ese momento fue detenido y luego liberado. En los últimos años, según lo manifestado por la mujer, su expareja la siguió sometiendo a violencia, sobre todo psicológica, verbal y económica, a lo que se agrega la nueva agresión física del martes úlimo.
Además, N. relató que tuvo que afrontar la violencia institucional por parte de operadoras y operadores judiciales que no sólo omitieron acciones para frenar a su agresor en todos estos años, sino que la revictimizaron. Por ello además de denunciar los hechos de violencia que involucran a su exmarido, el abogado Arias también pidió que se investigue la violencia institucional de género y hechos que pudieran "constituir incumplimiento de los deberes de funcionario público u otras figuras, al no haberse atendido debidamente en la atención de una víctima de violencia de género, en los términos de la normativa vigente", sostuvo.
El abogado pidió que se le tome declaración urgente a N. y se le realice el examen médico, además de que se remitan las actuaciones a la fiscalía competente. Además, destacó que la mujer está preocupada por los dos hijos, dado que "ella no sabe donde están, pero cree que están con el padre".
Una militante feminista de Cafayate que conoce el caso de N. dijo que la mujer "viene siendo violentada por las instituciones en donde va a buscar una respuesta ante la violencia que ejerce el progenitor de sus hijos". Señaló también que es la "mala víctima" ante los operadores y operadoras judiciales, porque no se queda callada, "se defiende" y la revictimizan.
"Ella necesita que le solucionen el problema de base que es la violencia que ejerce sobre ella el progenitor de sus hijos. La quisieron desalojar hace dos años, de la casa donde vivía con los hijos y con este hombre", sostuvo.
Por otro lado, la secretaria de Primera Infancia, Niñez y Familia de la provincia, Carina Iradi, dijo que las autoridades judiciales no le dieron intervención en el caso, pero que la pedirá y estaba requiriendo información sobre los chicos.