La acción judicial contra el protocolo antipiquetes del Ministerio de Seguridad que presentó la legisladora del Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST) Celeste Fierro sigue rebotando de juzgado en juzgado sin una decisión de fondo.

El camarista federal Eduardo Farah rechazó una apelación de la diputada porteña que pretendía que el expediente quedara radicado definitivamente en el juzgado federal a cargo de Sebastián Casanello. Casanello fue el juez que le dio al expediente el formato de habeas corpus, convocó a las partes a dos audiencias y recomendó a la ministra Patricia Bullrich que respetara las garantías constitucionales en la aplicación de protocolo. Pero el juez Farah revocó esa decisión y minutos antes de que se celebrara una nueva audiencia apartó a Casanello del expediente y envió el caso a la Justicia nacional de instrucción penal.

La causa recayó en el Juzgado de instrucción 28, pero su titular, Martín del Viso, le devolvió el expediente a Casanello. Ahora, nuevamente el camarista Farah rechazó la apelación de Celeste Fierro porque "en ningún momento se especificó qué intervención de las previstas en la ley de habeas corpus se acordó a los promotores de la acción declarativa inicialmente". "El procedimiento de habeas corpus no contempla la posibilidad de recurso alguno contra una cuestión como la que se intenta someter a conocimiento de la Cámara de Casación", añadió. "Las resoluciones en torno a cuestiones de competencia no revisten el carácter de sentencias definitivas ni de fallos equiparables a ellas", insistió Farah.

Así, el expediente regresó a la justicia de instrucción, pero, en caso de que el juez Del Viso mantenga su postura, podría llegar hasta la Corte Suprema. Mientras, el protocolo diseñado por Patricia Bullrich continúa vigente.