La oposición dialoguista apura al oficialismo en Diputados y se puso al frente de uno de los reclamos de los gobernadores de todo signo político en su disputa con el Gobierno por los brutales recortes económicos a las provincias. El interbloque Hacemos Coalición Federal (HCF) pidió una sesión especial para el 19 de marzo e impulsar la devolución a las provincias de los recursos del Fondo Nacional de Incentivo Docente (Fonid) que la Casa Rosada cortó abruptamente. La bancada que conduce Miguel Pichetto ya había solicitado otra sesión especial para el miércoles 13 de marzo y debatir una nueva fórmula de movilidad jubilatoria con ajustes por inflación. Aunque ninguno de los dos proyectos cuenta con dictamen de comisión y necesitan de dos tercios de los presentes para abrir el debate, obligan al oficialismo a negociar acuerdos para evitar que la fragmentada oposición termine de arrinconar al Gobierno con dos temas socialmente sensibles como educación pública y jubilaciones, que el presidente Javier Milei ataca con su política de “motosierra y licuadora”.
“Solicitamos convoque a sesión especial para día martes 19 de marzo del corriente año, a las 12 horas, para tratar el Proyecto 5298-D-2023 relativo al Fondo Nacional de Incentivo Docente creado por Ley N.º 25053 y sus modificatorias”, dice la escueta nota que entregó el bloque de Pichetto al presidente de la Cámara baja, Martín Menem. La misiva lleva la firma de 14 de los 23 diputados del interbloque, entre ellos macristas disidentes, la Coalición Cívica, el peronismo cordobés, el socialismo santafesino y Margarita Stolbizer.
Si bien el pichettismo celebró la convocatoria al diálogo de Milei y al Pacto del 25 de Mayo, la asfixia que sufren los gobiernos provinciales tiene plazos más cortos para la supervivencia de sus economías. Y así lo entendieron los dialoguistas federales, que movieron el tablero parlamentario para buscar restablecer el Fonid, que el Gobierno nacional eliminó como vendetta por el fracaso de la Ley de Bases y que pone en jaque a las cuentas de las provincias para sostener la educación pública.
Sin embargo, la intención tiene un primer escollo difícil de sortear: por tratarse de un proyecto sin dictamen de comisión debe reunir dos tercios de los presentes en la sesión para habilitar el debate en el recinto. Algo que la oficialista La Libertad Avanza y sus aliados más íntimos podrían bloquear.
HCF busca poner a prueba la verdadera voluntad negociadora del Gobierno. Decidió avanzar solo con la iniciativa para darle soluciones a los problemas que desde la Casa Rosada impusieron a las provincias. El oficialismo también sabe que la resistencia a discutir el proyecto no se podría estirar demasiado: hay muchas voluntades y votos, como para darle media sanción en Diputados: además de HCF, está la Unión por la Patria, el FIT, una parte de la UCR y partidos provinciales. Y en el Senado, el peso de los gobernadores es aún mayor.
El movimiento de pinzas de los federales incluye el pedido para impulsar una nueva fórmula de actualización de las jubilaciones atada a la inflación, y logró sumar hasta a Ricardo López Murphy. La solicitud es para el miércoles de la semana próxima. La iniciativa tiene la misma dificultad que el Fonid: no tiene dictamen de comisión y necesita dos tercios para abrir la discusión.
Pero el cerco sobre el Gobierno empieza a cerrase con los actores menos esperados. Ni sus aliados mas estrechos están dispuestos a pagar el costo político de la licuación de las jubilaciones y pensiones de la que se jacta Milei y su ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo. La macrista María Eugenia Vidal presentó su propio proyecto para actualizar haberes jubilatorios por inflación, con la firma de su jefe de bloque PRO Cristian Ritondo y muchos otros de sus dirigidos.
La oposición dialoguista pone a prueba la capacidad negociadora del Gobierno, aunque Milei se aferra al mega DNU 70/23 que habilita las decisiones del Ejecutivo y que los dialoguistas aún dudan en rechazar.