En su discurso de este miércoles frente a estudiantes del colegio Cardenal Copello, Javier Milei denunció que en una universidad privada “hay una profesora que persigue por ser liberal” a Iñaki Gutiérrez, su asesor de imagen en redes. Esa supuesta “persecución” que el Presidente denunció es similar al hostigamiento que él mismo desató horas después contra la docente jubilada que a la salida de ese acto criticó al Gobierno por los ajustes y los magros haberes que percibe.

El berrinche de Milei con una exmaestra de 4º grado fue lanzado en su ring preferido, las redes sociales. Allí descalificó duramente a la exmaestra Teresa (cuyo apellido no trascendió). Le dijo “farsante y mentirosa”, “embustera” y “robacámara”.

Lo que había hecho Teresa al ser abordada por la decena de periodistas que aguardaba a la salida del colegio en el que estudió Milei fue desear que las medidas del Gobierno “ojalá sean buenas para todos”. Luego deslizó: “Yo soy jubilada y tan bien no estoy. Estoy esperando que mejore la situación y que no nos ‘apriete’ tanto con los ajustes”.

Pero el apriete tomó otro carril. Enfurecido por esa aparición que fue transmitida en vivo mientras él daba su discurso, el Presidente salió más tarde a defenestrar a la docente que cuestionó sus medidas de gobierno.

Primero publicó un posteo en el que aparecen los dichos y la foto de Teresa, y él la descalificó en mayúscula (una modalidad que se utiliza para remarcar la voz escrita): “DESENMASCARANDO A UNA GRAN FARSANTE Y MENTIROSA”.


La reacción pudo haber sido porque varios medios la presentaron como “la maestra de Milei” y, por lo que se supo después, ella no lo había tenido como alumno, aunque sí fue contemporánea a la cursada.

Pero el hostigamiento hacia Teresa no terminó allí ni se quedó en Milei. En otro posteo, el mandatario dio a conocer una nota que le enviaron las autoridades del colegio y en la que toman distancia de las expresiones de esa docente que trabajó allí hasta jubilarse. De hecho, en su diálogo con la prensa, Teresa comento que ese día estuvo allí “para pedir unos papeles al colegio porque parece que me jubilaron mal”.

La nota agradece al Jefe de Estado por su visita, aclara que “la Maestra Teresa (…) no fue maestra del Señor Presidente” y se diferencia de ella: “Sus declaraciones no reflejan la posición de esta institución”.

“Lo expresado por la Maestra Teresa –sentencia la nota- es, de acuerdo a nuestra recolección del paso del Sr Presidente por nuestra institución, incorrecto”.

Finalmente, la misiva agradece la visita de Milei y nada dijo sobre su discurso en el que, a contramano del “adoctrinamiento” escolar contra el que varias veces se expresó, calificó de “asesinato” a los abortos, aborreció al “comunismo”, al “marxismo” y a los “zurditos”; se expresó en contra de la asistencia social, defendió el ajuste de su gobierno, hizo una alusión obscena con un burro y bromeó cuando cayó desvanecido uno de los dos estudiantes que se desmayaron mientras él hablaba.

Satisfecho por la reacción y el apoyo de la institución en la que estudió, Javier Milei agradeció el comunicado “QUE DA PRUEBA DE LA EMBUSTERA Y MENTIROSA DE LA MAESTRA TERESA QUIEN NUNCA FUE MI MAESTRA. FARSANTE ROBACÁMARA”. (SIC)

En su breve aparición televisiva, la docente había opinado también que el aumento en los medicamentos es “terrible” y que los salarios docentes son “muy bajos”. Nada que sea incomprobable.