Un jurado de enjuiciamiento destituyó a la fiscal mendocina Anabel Orozco por el delito de “fraude a la administración pública”, luego de comprobar que en noviembre del año pasado, mientras figuraba con licencia médica, la mujer viajó a Florianópolis junto a varios amigos. La expulsión fue votada por 17 de los 21 miembros del jury; en cambio, los cuatro restantes sugirieron una suspensión por cuatro meses. La propia fiscal había subido fotos de esas “vacaciones” a su cuenta de Facebook.
En el Salón de actos del Palacio de Justicia de Mendoza, 14 legisladores provinciales y los seis jueces de la Corte Suprema de esa región volvieron a reunirse para debatir sobre el futuro de Orozco, de 64 años. La última vez que se habían visto las caras fue en marzo, cuando decidieron suspender a la fiscal en sus funciones. Pero la fecha del debate de destitución se aplazó para el 26 de octubre. En ese período, la fiscal presentó su renuncia, que no fue aprobada por el gobernador provincial, Alberto Cornejo.
Ayer, el jurado de enjuiciamiento discutió el pedido del procurador general de la Corte Suprema de Justicia de Mendoza, Alejandro Gullé, quien elevó el pedido de jury a la fiscal por “desorden de conducta”. A su vez, escucharon el alegato de la fiscal, quien aseguró que “el reposo no es estar tirada en una cama. La actitud de la recreación es uno de los tratamientos de la lumbalgia”. Al momento de la decisión, de los 21 integrantes del jurado, 17 votaron a favor de la destitución de la magistrada por el delito de “fraude a la administración pública”. Los cuatro restantes (los jueces Omar Palermo, Mario Adaro, Julio Gómez y Alejandro Pérez) habían promovido una suspensión por 180 días, que le permitía jubilarse con rango de fiscal.
En noviembre pasado, Orozco solicitó en el Ministerio Público Fiscal de Mendoza una licencia médica por una “lumbalgia aguda”, según figura en el expediente. Días después, junto a varios amigos, la fiscal viajó a las playas de Florianópolis, en el sur de Brasil. Allí, la mujer subió a su muro de Facebook distintas fotos sacadas con su cámara. A su vuelta, Orozco siguió con la licencia, hasta que varios medios publicaron el caso. “Obré de acuerdo a lo que mi complejo estado emocional requería, y el hecho de realizar un viaje de descanso mientras gozaba de una licencia por enfermedad no constituye falta alguna”, justificó la ahora ex fiscal.