El futbolista Alejandro "Papu" Gómez, quien atraviesa una suspensión por doping, calificó como "una noticia súper dolorosa" el rechazo de la Justicia de España a su pedido de apelación para que le reduzcan la sanción, que lo seguirá manteniendo alejado de la actividad profesional al menos por dos años.
El mediocampista de 36 años, integrante del plantel argentino campeón del mundo en Qatar 2022, utilizó su cuenta de Instagram para realizar su descargo, un día después de conocerse el revés a su presentación.
"Hola a todos, como ya saben rechazaron la apelación. Es una noticia súper dolorosa y que me desilusiona mucho. Con mi equipo de trabajo y abogados vamos a seguir luchando hasta las últimas instancias para volver a jugar", comentó el jugador a través de una storie en su perfil de las redes sociales.
"Gracias por los mensajes de apoyo y cariño. Acá estamos a pesar de las dificultades, más fuerte que nunca", añadió en el texto, que lleva una imagen suya de fondo entrenando.
El rechazo a la apelación del "Papu" Gómez
El entrenador del Monza, Raffaele Palladino, anticipó este viernes previo al partido del equipo con Genoa por la Serie A que "el recurso fue rechazado, por lo que sé. El club lo comunicará".
El contrato de Gómez con el club italiano -con el que solamente disputó 40 minutos en dos partidos en octubre de 2023- vence en junio de este año y su futuro futbolístico a sus 36 años es una verdadera incógnita.
El doping positivo del "Papu" Gómez
El campeón del mundo con la selección argentina en Qatar 2022 dio positivo en un control antidoping a mediados de noviembre de 2022, cuando todavía jugaba en Sevilla y se conoció casi un año después, cuando ya estaba en Italia.
El ex Arsenal y San Lorenzo, entre otros clubes, fue suspendido por "negligencia grave" tras haber consumido terbutalina, una sustancia prohibida por la Agencia Mundial Antidopaje (AMA).
Luego de conocerse la noticia, el futbolista publicó un comunicado en sus redes sociales y esgrimió que tomó por error un jarabe para la tos de su hijo menor.