John Wilkes Booth musita el parlamento de la pieza que se lleva a cabo sobre las tablas del teatro Ford escondido detrás del palco presidencial. En medio de los aplausos por el final de uno de los actos de “Our American Cousin”, se coloca detrás de su presa y dispara la única bala que podía albergar su Deringer calibre 44. Al ejecutar por la espalda a Abraham Lincoln consuma el primer magnicidio en la historia de los Estados Unidos. Y también le da sentido a lo que vendrá en los siete episodios de La caza del asesino, la producción que se mete entre las bambalinas de ese hecho infame del que parece saberse todo. “Es como una serie de true crime pero del siglo XIX”, le dice a Página/12 Monica Beletsky, la showrunner de la miniserie que Apple TV+ estrenará el próximo viernes.
Amén de su título, la propuesta va mucho más allá de lo que pasó ese 14 de abril de 1865 en el teatro Ford de Washington, de esa proclama ("Sic Semper Tyrannis") sangrienta tan solo cinco días después del final de la guerra civil estadounidense. De hecho, el protagonista no es el simpatizante confederado y actor sureño (Anthony Boyle) que dice “haber nacido con la chance de ser alguien”. Ni siquiera el decimosexto presidente (Hamish Linklater) de sotabarba que parece presentir la tragedia. Son fundamentales, claro está, pero el rol principal le cae a Edward Stanton (Tobias Menzies de The Crown). El secretario de Guerra de Lincoln y fiscal general durante ese período, es consciente de lo que implica la captura del criminal a punto de convertirse en un símbolo de los estados segregacionistas. También tiene bastante relevancia Mary Todd (Lili Taylor), la viuda del mandatario. A tono con el thriller político, La caza del asesino tiene la clara intención de desempolvar figuras –públicas y desconocidas- y las circunstancias detrás de un crimen que aun resuena en la opinión pública de su país. “El hecho de que altos rangos de la Confederación aparezcan mencionados en el juicio como partícipes del magnicidio, es algo que incluso no es muy conocido en nuestro país”, asegura Beletsky en una conferencia de prensa de la que participó Página/12.
-El proyecto nace del libro de investigación de James L. Swanson editado en este siglo. ¿Cómo fue el trabajo de adaptación?
-El libro está increíblemente documentado como toda buena obra de no ficción. El asesinato fue a la vista de mil quinientas personas y tiene grandes detalles. Lo mismo que la fuga de Booth, a quienes se cruzó y lo que sucedió al final. Fue una gran fuente para que los aspectos centrales fueran bien precisos. Mi interés no era centrarme tanto en el villano, no queríamos hacer un estudio de sus motivaciones o de porqué se convirtió en un asesino. John Wilkes Booth se veía a sí mismo como un héroe, pero esa no era nuestra mayor motivación. Queríamos contar un thriller como de la caza de un gato y un ratón y que el punto de vista fuera el de la investigación. Parte del sostén es la persecución a Booth, aunque queríamos traer a la luz a otros personajes salientes del caso.
-De hecho, el punto de vista es el de Edward Stanton. ¿Por qué?
-Es un personaje que estuvo detrás de las cortinas durante la Guerra Civil. Y cuando cometen el asesinato tuvo muy pocas horas para convertirse en el héroe. Tenía unos pensamientos muy de avanzada sobre los derechos civiles. Y Tobias Menzies te convence de que estás en ese período del pasado. Es muy auténtico y natural. Le creés. Además es alguien reconocido por sus papeles secundarios y acá hace una transición hacia el protagónico. Lo que también sucedió con Stanton.
-Se trata de un thriller de corte histórico. ¿Cómo fue el balance entre esos dos componentes?
-Fue un gran desafío. El siglo XIX nos sirve de gran paisaje. Y a la vez se nota el tono de policial negro y el corte biográfico, dentro de una historia que es tan compleja. Fue una declaración de amor a esos géneros, pero con una historia que sucedió hace más de ciento cincuenta años y sigue siendo relevante hasta la actualidad.
Programados
* Prime Video le dará lugar a Fallout el próximo 11 de abril. Los tres primeros episodios de la serie, basada en una popular franquicia retro futurista de videojuegos, llevan la firma de Jonathan Nolan (Westworld) . La historia sigue a Lucy (Ella Purnell) quien abandona su refugio postapocalíptico para volver a la tierra de sus ancestros. Aires de western, fichines y un futuro derruido por lo post nuclear.
* Joe Wright (Orgullo y Prejuicio) será el encargado de darle forma a The Department. Paramount+ tendrá entre sus novedades a esta serie de espionaje basada en la producción francesa Le Bureau des Légendes. La ficción original, que tuvo cinco temporadas por la tevé de su país, se centra en la vida cotidiana y las misiones de los agentes del principal servicio de seguridad exterior galo. George Clooney aparece detrás del proyecto como productor ejecutivo.
* La tercera temporada de Hacks podrá verse desde el próximo 2 de mayo por Max. Un año después de separarse, Deborah Vance (Jean Smart) disfruta del éxito de su especial de standup, mientras que Ava (Hannah Einbinder) busca nuevas oportunidades en Los Ángeles. Showbizz, choque generacional de comediantes y una lista de cameos que incluye a Helen Hunt, Christina Hendricks y Christopher Lloyd, entre otros.
El personaje
Rocco Siffredi de Supersex (Alessandro Borghi). La Boogie Nights italiana tiene como protagonista absoluto al “Semental de la Fuensanta”. Desde su infancia en Ortona hasta su consagración en la industria del porno, dueño de un pene de 24 centímetros que apareció en cerca de 1600 películas. Eso sí, la entrega llega un poco después que la miniserie sobre Nacho Vidal, su colega ibérico que ostenta una performance similar y un centímetro más en su miembro.