El rector de la Universidad Nacional de Rosario Franco Bartolacci consideró ayer que la ciudad "está en un momento bisagra" en cuanto a la crisis de violencia urbana, y que urge tomar medidas en dos direcciones, este año. En una ciudad totalmente conmocionada, Bartolacci planteó que hay que abordar "al mismo tiempo" dos estrategias: "El mismo énfasis que el estado en distintos niveles busca ponerle a la intervención en seguridad específica hay que ponerselo a las políticas sociales, culturales, educativas, que son las que pueden revertir esta situación". 

Bartolacci es uno de los impulsores de la Multisectorial por la Paz, que ayer se reunió con autoridades (ver aparte). "En la Multisectorial están integradas voces de entidades gremiales, entidades empresarias, la Bolsa de Comercio, la Universidad pública, colegios profesionales, hay mucha diversidad. Creo que eso enriquece la posición y la perspectiva. Ojalá ante la magnitud y la profundidad de lo que está pasando podamos tener la madurez suficiente para entender que la única manera de resolverlo es encontrar un camino común colectivamente, y que estamos atravesando un momento bisagra. Si no hay capacidad, este año, de empezar a revertir la situación y bueno, probablemente hacia futuro todo sea más oscuro", dijo el rector en declaraciones al programa La siesta jugada, por Radio Nacional Rosario. 

La Multisectorial por la Paz se constituyó hace más de un año, ante la preocupación generalizada por la seguridad pública. "Cuando constituimos la Multisectorial, lo hicimos con tres razones: primero, porque entendíamos que mejor que levantar la voz individualmente cada institución por sí misma, correspondía hacerlo de manera colectiva, porque no era algo que nos preocupara corporativamente a cada quien en su lugar, sino que era una preocupación genuina que atravesaba toda la ciudad de de Rosario", expresó. 

El segundo cometido fue "reclamarles a las autoridades competentes en todos los niveles y en todos los poderes del Estado acciones que pudieran contribuir a revertir la la situación". El tercer punto de la convocatoria fue "poner a disposición lo que esté en el marco de las competencias de cada institución para contribuir a la tarea de recuperar la paz". Es que ninguna de las instituciones que la integran Multisectorial son especialistas ni tienen abordaje directo en las políticas de seguridad. "Sí creemos fervientemente que la resolución del problema en términos estructurales debe tener un abordaje integral, que por supuesto tiene que contemplar políticas de seguridad más estrictas pero, al mismo tiempo, debe abordar políticas integrales vinculadas a cuestiones sociales, educativas, culturales, que son desde mi perspectiva las que permitirán revertir una situación que es dramática, en el mediano o largo plazo". 

Bartolacci subrayó que la situación excede a Rosario. "No es una situación de la ciudad, aunque adquiere en Rosario un dramatismo específico por la profundidad y la complejidad que ha tomado el problema", puntualizó. 

"Es muy doloroso todo lo que estamos viviendo, genera mucha tristeza y mucha preocupación, pero creo que quienes tenemos alguna responsabilidad pública en la institución que sea, no podemos más que ocuparnos también de lo que nos corresponda, lo que sea de nuestra competencia, lo que podamos hacer, porque es ineludible para una ciudad que no soporta más vivir de esta manera". 

Desde la Universidad entienden que "la situación es muy muy dramática, tan dramática como compleja en su posibilidad de resolución, porque ha tomado una profundidad y un arraigo el problema, en un contexto tan delicado del país, que hace que cualquier salida a esta situación demande mucho tiempo, pero además, no se puede revertir con una sola medida ni de una sola manera, de un día para el otro". 

Con respecto a las políticas sociales, Bartolacci señaló como "un problema" que se hayan discontinuado "programas que podrían haber sido muy relevantes para que la situación, aunque fuera problemática porque el contexto general del país no contribuye a que se revierta, pudiera tener menor penetración de la que efectivamente tiene". Se refería al Nueva Oportunidad y el Plan Abre, que dejó de lado Omar Perotti y ahora relanzó Maximiliano Pullaro. 

Su pedido más concreto fue "correr este problema de la agenda político partidaria, porque también se requieren políticas de Estado estructurales consensuadas. Lo que no puedo creer es que no nos podamos sentar en una mesa todos los que tengamos alguna competencia y vínculo con esta problemática, para acordar cinco o diez acciones. Después, habrá matices, habrá perspectivas distintas o abordaje distintos, pero hay que tener esa capacidad. Creo que el contexto general pone muchos interrogantes, pero, si no logramos eso, soy bastante pesimista respecto de las capacidades de resolución del problema".