El gobernador Maximiliano Pullaro, respaldó ayer la reforma que propone el presidente, Javier Milei, para que las Fuerzas Armadas intervengan en seguridad interior, y volvió a calificar de “ataques terroristas” los hechos de violencia que se encuentra viviendo la provincia. “Se está discutiendo un artículo de la Ley de Seguridad Interior. Creo que nosotros necesitamos una presencia policial muy fuerte. Y si es militar, acompañando las tareas de prevención urbana, también, porque lo que estamos viviendo son hechos de terrorismo y se tipifican de esta manera", sostuvo Pullaro en declaraciones televisivas.

En este sentido, el mandatario provincial dijo que el objetivo de los grupos que se dedican a ejercer violencia en Rosario "es quebrar decisiones de los gobiernos constitucionales a través de sembrar el terror y nosotros nos vamos a mantener firmes”.

“No nos tenemos que quedar en debates ideológicos. Tenemos que ser muy prácticos para resolver un problema muy grave que estamos teniendo en este momento en la ciudad de Rosario", consideró.

En esa línea, Pullaro reclamó: "Que venga el Ejército, que vengan fuerzas federales, que venga el acompañamiento de fuerzas tácticas de otros gobiernos provinciales para que a los rosarinos le podamos dar un poco de paz”.

En tanto, respecto de la posibilidad de que las Fuerzas Armadas tengan atributos adicionales para manejarse en seguridad interior, el gobernador expresó: “Por supuesto, previo a un entrenamiento en lo que es la prevención urbana".

“El Ejército no está formado para tareas preventivas, sino defensivas y de ataque, pero rápidamente son personas entrenadas que tienen formación militar, formación táctica, formación en inteligencia, con lo cual, están muy cerca de poder llevar adelante también acciones preventivas”, argumentó.

El mandatario provincial habló sobre la ola de violencia en Rosario luego de que Milei encabezó ayer una reunión de Gabinete en la que monitoreó la realidad de la ciudad de Rosario, donde se trató el envío de una nueva Ley de Seguridad Interior en el Congreso.

De esta manera, las Fuerzas Armadas podrían tener atribuciones “adicionales”, hoy limitadas por la ley actual que, en su artículo 27, las autoriza a la afectación de “sus servicios de arsenales, intendencia, sanidad, veterinaria, construcciones y transporte, así como de elementos de ingenieros y comunicaciones”.

Más temprano, Javier Milei había barajado la posibilidad de que esto ocurriera: “Estamos evaluando enviar una nueva ley de seguridad interior que les permita a las Fuerzas Armadas que puedan tomar algunas acciones adicionales”. Según especificó, el tema fue eje de debate en la reunión de gabinete de este martes. “Luis Petri trajo la ley y ya la tenemos lista para mandarla, pero Patricia (Bullrich) estaba en el avión volviendo de Rosario y me pareció prudente tomar una decisión final cuando faltaba una de las partes”, dijo el Presidente.

En la misma jornada se conoció un documento firmado por la Mesa de organizaciones de derechos humanos que rechaza la " militarización de Rosario", y que señala que "ante la violencia descarnada que atraviesa la ciudad, en primer lugar, nos solidarizamos con las familias de quienes fueron víctimas directas de la furia indiscriminada que avanza sobre nuestra sociedad".

"También -agregaba el texto- queremos expresar nuestro más profundo repudio a esta escalada que parece no tener fin y que las propuestas del estado en los tres niveles, apuestan a una respuesta más violenta. Es preocupante ver cómo desde el Gobierno Provincial prometen endurecer medidas a los detenidos y desde el Gobierno Nacional envían más efectivos y móviles. Repitiendo la fórmula de invadir con fuerzas represivas los barrios donde NO habitan los dueños del negocio que engendra muerte, y se tornan fáciles los gatillos. Suben a las unidades del transporte público requiriendo documentos y requisando a laburantes y estudiantes. Invaden nuestra ciudad intimidando a quienes transitan, trabajan y viven esta población" señala el documento.

En esta línea agrega que "sabemos que esta fórmula no sirve. La han impulsado y probado muchas veces. Llenar de uniformados con armas no es la solución, muchas veces es parte del problema. El Estado se retiró de los territorios y se deberá tomar otra vez con verdadera presencia. Con más y mejores escuelas, talleres, centros culturales y deportivos. Con trabajo, para que los comedores sean un recuerdo porque los niños comen con su familia" culmina el escrito de la Mesa.