“Si la Planta Depuradora Sur deja de funcionar hasta en la plaza 9 de Julio va a estar saliendo cloaca”, afirmó el presidente de Aguas del Norte, Ignacio Jarsún, al respoinder tras enterarse de que la jueza de Minas, Victoria Mosmann, le impuso una multa de 500 mil pesos diarios por incumplir una orden judicial.
La multa es porque la empresa no presentó en el plazo de 48 horas un plan de mitigación para que no se vuelquen líquidos cloacales sin tratar a las aguas del río Arenales.
Sucede que de 8 mil litros diarios de líquidos cloacales, la Planta Depuradora Sur solo trata cinco mil, mientras que los tres mil restantes son volcados directamente al río Arenales, que atraviesa la ciudad de Salta.
En el marco del largo proceso judicial que se lleva a cabo por demanda de vecinos y vecinas de este río, se determinó que a lo largo del recorrido del Arenales había 23 tomas ilegales para extraer el agua contaminada y regar fincas de frutas y hortalizas cuyas cosechas luego se vendían en la ciudad de Salta. Esto a su vez generó el brote de salmonella que afecta a la población desde al menos 2018, según datos epidemiológicos.
En la imposición de la multa, la jueza Mosmann afirmó que aquella sentencia indica que desde 2017 se debería haber presentado un Plan de Contingencia que nunca se cumplió por parte de la empresa. A ello añadió que si bien la demanda es contra la provincia y la municipalidad, estas jurisdicciones presentaron algunos planes de acción para cumplir con la sentencia, a diferencia de la actitud de Aguas del Norte.
Ayer en una respuesta que dio de manera oficial mediante un video, Jarsún afirmó que la empresa no tiene “plan B”, dado que la única solución en este caso es la culminación de la obra de la Planta Depuradora Sur, cuya ejecución tiene un avance del 70 por ciento pero ahora se encuentra paralizada por la falta de envío de fondos nacionales. Añadió que la jueza ordenó que cese el funcionamiento de la Planta Depuradora Sur y que eso implicaría que los 700 mil habitantes de la ciudad de Salta tengan problemas con las cloacas. Frente a ello, adelantó que apelará la sentencia dado que sostuvo "es de imposible cumplimiento".
Sin embargo, el abogado querellante del amparo vecinal presentado en 2011, Pedro Arancibia, dijo que la premisa de Aguas del Norte es “falsa” y que en ningún momento la jueza ordenó la suspension del funcionamiento de la Planta.
Por el contrario, afirmó que durante las audiencias realizadas en el marco de esta causa se plantearon “alternativas” para morigerar el daño ambiental, pero nunca fueron evaluadas o aplicadas por Aguas del Norte. Adelantó que en pos de que la orden judicial se cumpla, podría solicitar embargos.