“En el partido de Escobar hay un colectivo de tangueros bastante fuerte”, explica Matías Morán en la previa de la segunda edición del Festival de Tango de Escobar. El encuentro de dos días reunirá a músicos, bailarines y DJs del género en el Anfiteatro El Dorado (de Ingeniero Maschwitz, en caso de lluvia la actividad se trasladará al microestadio de Garín, también en el partido de Escobar).

Morán es parte del equipo de contenidos de la Secretaría de Cultura de Escobar y director de la programación del Festival. Músico él mismo, conocedor de la historia del género y de sus nuevas tendencias, propone un equilibro entre la tradición y las corrientes renovadoras y entre el tango bailable y orquestas de concierto. “En la grilla no pueden faltar los artistas locales, acá hay dos proyectos muy fuertes que siempre tienen espacio, que son el cuarteto Flor de lío y El Bordoneo, que ya estuvieron el año pasado”, cuenta. “También hay artistas de localidades cercanas y proyectos más incipientes, que para nosotros es muy importante que tengan roce con formaciones más grandes o con más trayectoria y reconocimiento”, explica. La programación de este año incluye así a grupos como Siniestra Tango, el ballet Carpe Diem, Ramiro Gallo con su quinteto y Los Reyes del Tango, pero también a valores emergentes locales, como los bailarines Guadalupe Rodino y Yoshi Shinji, ganadores de la categoría en los Torneos Bonaerenses.

“Con el correr de los años empezamos a construir desde la Secretaría de Cultura espacios para que desde lo institucional tengan su acompañamiento los bailarines, grupos musicales, milongas y artistas que vienen trabajando en la zona”, señala Morán. El Festival local empezó en 2023 pero Morán señala varios hitos en el derrotero, como una milonga al aire libre (“una de las primeras aprobadas con protocolo”, cuenta con orgullo), una milonga en la peatonal de Escobar que llenó la calle, los talleres del programa Barrio Cultura, ser sede de la visita de la Milonga Federal del CCK (el organizador recuerda con cariño la llegada de algunos colectivos con milongueros porteños, que conocieron la zona), y de la Milonga Itinerante de la Provincia. “Después de muchísimos años acá de bastante ostracismo y difíciles a nivel cultural, desde que arrancó esta gestión hace ya unos ocho años lo cultural ha cobrado una gran preponderancia y hay una intención de volver a Escobar un faro cultural”, celebra.

“La experiencia del año pasado fue muy grata, muy enriquecedora, con un tránsito de 3 o 4 mil personas”, recuerda Morán sobre la primera edición del Festival. “Nos dimos el gusto de tener al Sexteto Mayor, a Adriana Varela, fue un comienzo de lujo. Este año no queríamos ir a menos, pero también es cierto que la realidad económica y presupuestaria no es la misma y hubo que buscar un equilibrio”, reflexiona. “Estamos empujando para que sea un lindo encuentro para la comunidad tanguera de Escobar, apuntamos también a que lleguen vecinos de otras localidades, y también tenemos muchas ganas de que desde Capital empiecen a poner un pie los milongueros porteños, que descubran qué lindo paseo es venirse a Escobar a bailar tango”.