Dos sepultureros viven y trabajan al borde de una fosa común de donde sale una mujer que llegó viva a su propio entierro. Lo absurdamente caricaturesco puede hacer frente a la crudeza del dolor, el abandono, lo irracional, lo injusto. Con dirección de Fran Alonso y las actuaciones de Claudia Simon, Nicolás Terzaghi y Patricio Pietri. La función es parte del ciclo Teatro por la Identidad, y previamente se leerá un testimonio del Archivo biográfico de Abuelas de Plaza de Mayo (Hoy, a las 21, en el Teatro del Rayo)