El periodista y conductor Víctor Hugo Morales analizó el "poder" que manifiesta el gobierno de Javier Milei y cómo los medios de comunicación son cómplices del desastre económico.
El editorial completo de Víctor Hugo Morales
Lo que tenemos en la Argentina es una exposición drástica sobre de qué estamos hablamos cuando se habla del poder.
Robar a los jubilados así, sin que se les caiga un anillo. Sacarles un 30 por ciento de un hachazo y que se lo banquen. Eso es el poder.
Contaron, por supuesto, con la mafia de Clarín y el sidecar de La Nación, escribiendo títulos que disimulan la estafa, solo te dan la información.
El horror económico en continuado. Poder llevarlo a cabo y que no pase nada. Eso es poder.
Presentarse en la televisión como lo hizo Caputo para decir mentiras disfrazadas, cualquier cosa, y que en vez de críticas, surja el apoyo, el disimulo. Dejar flotando la idea de que se pusieron al día y dejar en el olvido la estafa de los dos primeros meses. Eso se lo cobras a Magoya.
Barajó Milei, cortó Caputo y repartieron las cartas haciendo trampa, como cuando jugamos con los chicos.
Ellos se dieron un Chinchón en la mano y los jubilados, como decimos al tomar las cartas, de cada pueblo un paisano. Y el que anota te roba con el lápiz.
Es muy duro. Uno se ilusiona con el domingo de pueblo, pero al otro día te la dan de atrás. Y en un rato, el vocero te dice que es lo que quería el 56 por ciento, seis de cada diez argentinos. Seis de cada diez jubilados se dieron un tiro en el pie en nombre del odio que supieron conseguir.