A poco de cumplirse una semana del crimen en la peluquería de Recoleta, donde un hombre sacó un arma y le disparó a un compañero de trabajo, la División Homicidios de la Policía de la Ciudad allanó este martes por orden de la Justicia la casa del barrio porteño de Balvanera. Ahívive el hermano de Abel Guzmán, el peluquero prófugo.
“No hay nada. Había que haber hecho este procedimiento hace una semana”, confió una fuente del caso. Luego, contaron que hallaron un colchón comprado por el prófugo en el lugar, lo que les permitió certificar que en la semana vivía allí y se iba a su casa de la localidad de Merlo los sábados y domingo.
El operativo se realizó en Paso al 700. No es el primer procedimiento que se hace en el marco de la causa: ya habían requisado el domicilio de la calle Agrelo de la localidad bonaerense de Merlo, donde vivía el sospechoso que desde hacía al menos siete años trabajaba en la peluquería de Recoleta y también era colorista, al igual que Germán Medina, la víctima.
El otro allanamiento fue en la provincia de Santiago del Estero, de donde Guzmán es oriundo y en donde se estaba construyendo una casa. Con respecto al episodio, su madre, Cecilia Guzmán, dijo que vio las imágenes del crimen en una sola oportunidad y no quiso volver a hacerlo. “No sé qué decir, porque estoy muy triste”, admitió. Y añadió: “Hablé con él hace dos o tres días. No lo noté raro o mal. Hasta donde sé, trabajaba mucho e iba a casa de un hermano casi solo a dormir”.
El juez Javier Sánchez Sarmiento, del Juzgado N°48 a cargo del caso, encomendó la investigación a la División Homicidios de la Policía de la Ciudad, así como a su División Búsqueda de Prófugos y a la UFECRI, el área de captura de evadidos de la Procuración que encabeza el fiscal José Campagnoli.
Desde el principio, se monitorea de manera intensa a los familiares de Guzmán. También se requirió a empresas de telefonía celular los registros de impacto en antenas, para seguir un posible rastro de fuga.