COMO EL MAR - 8 puntos
(Argentina/Uruguay, 2024)
Dirección: Nicolás Gil Lavedra.
Guion: Zoe Hochbaum y Gustavo Gersberg.
Duración: 84 minutos.
Intérpretes: Sofía Gala Castiglione, Zoe Hochbaum, Carmen Maura, Néstor Guzzini, Javier Chávez.
Estreno exclusivamente en salas de cine.
“Te dije que no me hables”, repite la adolescente Azul, varias veces, mientras su hermana mayor, Paula, maneja el auto que las lleva a recibir la peor de las noticias: su madre internada acaba de fallecer. Las hermanas sean unidas, aunque, como en cualquier familia más o menos normal, las peleas sean moneda corriente. Más cuando la diferencia de edad es exactamente el doble entre una y otra, 17 y 34 años.
El punto de partida de Como el mar, tercer largometraje de Nicolás Gil Lavedra (Las grietas de Jara), es un clásico del drama intimista: la renovación o cambio de un vínculo familiar a partir de una muerte. Y algo (mucho) de eso hay, aunque con una vuelta de tuerca inesperada: una requisa secreta de Azul en armarios y cajones la pone en estado de alerta total. La fotografía no miente: Paula no es en realidad su hermana, sino su madre, y las cenizas guardadas en la cajita son en realidad las de la abuela. Ante tamaño descubrimiento, y la confesión total de Paula, el dúo decide emprender un viaje por las costas uruguayas con destino final en Cabo Polonio, el lugar donde Paula quedó embarazada más de tres lustros atrás.
El guion escrito por Zoe Hochbaum, que además interpreta a la joven Azul, y Gustavo Gersberg pone primera en la caja de cambios de la road movie, interponiéndole a la pareja de viajeras varios problemas para ingresar al país vecino. Así, con un camionero simpático pero dispuesto a cobrar por los servicios de traslado non sancto, Como el mar introduce pizcas de humor en una trama por cierto dramática. Es Carmen Maura como la Tía Mecha, española instalada en Montevideo y cuya casa es la primera parada del tour, quien habilita la comprensión y la ternura en un relato marcado por incomprensiones, algunas de ellas lógicas. “¿Nunca pensabas decirme que en realidad sos mi mamá?”, le escupe Azul a Paula en otra estación de paso, cerca de Punta del Este, en un campamento improvisado entre altos pinos. Por momentos, Paula (Sofía Gala) parece comportarse como la adolescente que fue años atrás, mientras la meditativa Azul conjura en sus facciones el enojo y la circunspección.
Rodada en locaciones uruguayas con encuadres que parecen sugerirle al espectador que se dé una vuelta turística por esos bellos pagos, Como el mar avanza hacia el desenlace apoyada en las muy buenas actuaciones de Hochbaum y Gala Castiglione, quien usualmente cumple y dignifica cualquier clase de rol que se le ponga a tiro. Y si bien el relato no logra esconder cierto carácter derivativo, varios detalles ayudan a construir un bienvenido tono agridulce, como esas dos escenas duplicadas que describen la despedida de las cenizas de la madre-abuela, lanzadas al mar no una sino dos veces.