La producción de las pymes industriales mejoró por tercer mes consecutivo al crecer en septiembre 3,3 por ciento respecto a igual mes del año anterior, aunque en nueve meses acumula una baja de 0,9 por ciento interanual, según informó ayer la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME). Pese al avance, el 42 por ciento de las firmas consultadas continúan evaluando como “regular” o “mala” la situación de su industria.
El aumento interanual alcanzó al 53,3 por ciento de las industrias, que declararon subas anuales, la proporción más alta en 4 años, mientras que la cantidad de empresas en declive también se redujo a 27,9 por ciento. “Continúa la recuperación industrial, pero la inversión pyme llegará cuando las tasas de interés bancarias bajen y se ocupe la capacidad instalada ociosa”, describió Fabián Tarrío, presidente de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
Según la Encuesta Mensual Industrial realizada por CAME entre 250 industrias pymes, más empresarios del sector aseguran que la caída paró y está comenzando la recuperación. De los 11 sectores relevados hubo 9 con progreso en la comparación anual: material de transporte (13,5 por ciento); productos de caucho y plástico (7,1); papel, cartón, edición e impresión (6,5); productos eléctrico-mecánicos e informática (6,1); productos de metal, maquinaria y equipo (5); calzado y marroquinería (5,4); productos químicos (0,9); maderas y muebles (1,9); y productos textiles y prendas de vestir (2,8 por ciento). En cambio, cayeron minerales no metálicos (-4,2 por ciento) y alimentos y bebidas (-2,3 por ciento).
La rentabilidad también mejoró el mes pasado: el 68 por ciento de las industrias dijo haber cerrado agosto con ganancias, el 19 por ciento con nulo rédito y sólo el 14 por ciento con rendimiento negativo. En septiembre, los costos de producción aumentaron 3,6 por ciento promedio según las respuestas de los empresarios. El sector acumula una caída de 0,9 por ciento en nueve meses del año, con lo cual podría finalizar el año con un resultado levemente positivo frente a 2016, aunque por debajo de 2015.