Este sábado se realizará la 12º edición del Festival de Tango del Ecunhi. La cita es desde las 16 en Av. del Libertador 8151, dentro del Espacio Memoria y Derechos Humanos. Con la conducción de Eduardo Parise habrá varias actividades: por un lado se proyectará en el encuentro un documental (En una esquina de Barracas, con la dirección de la cineasta Liliana Furio); además se presentará el libro Que siga la poesía, de Paula Castro; también habrá micrófono abierto en una peña de cantores, además de clase de baile (con Julie August y Furio) y un “Cabildo abierto del tango”, coordinado por la cantante Sandra Márquez. Asimismo, participarán del festival Ariel Pirotti Cuarteto, Andy Delfino, Camila Arriva, Gisela Magri, Lucrecia Merico y La Gitana Trio. La entrada será con un bono contribución voluntario.
“Nuestra consigna y misión es transformar el horror y la muerte a través del arte y la educación, en esa misión estamos quienes militamos y sotenemos día a día el espacio, con las distintas actividades”, plantea Lucrecia Merico, cantante y responsable del Festival, ante la preocupación por la situación que atraviesa el Ecunhi bajo el gobierno de Javier Milei. Aunque el Ecunhi pertenece a la Asociación Madres de Plaza de Mayo, Merico reconoce que “cuando hay gobiernos en que sus políticas de arte y educación son afines a nuestro pensamiento logramos hacer algunos convenios para sostener programas educativos y culturales”. Claramente, en la actualidad no es el caso.
“Lo que nosotros queremos es que el Festival se posicione como un espacio de encuentro y revitalización del género. Que en este espacio de memoria se puedan unir los clásicos del tango con la poesía actual, un lugar donde desde el tango se pueda expresar la realidad actual”, propone la organizadora.
“En el caso del Festival de Tango fue creado en 2011 porque en ese momento se cerraban lugares que se dedicaban al género y era necesario que el tango dijera presente en este espacio. En la historia del género, autores como Discépolo, Homero Manzi y otros, fueron personas comprometidas socialmente, así como en la actualidad hay autores de tango que tienen conciencia social y se comprometen con todo lo que sucede desde la palabra y la acción”, explica Merico.
Una de las novedades más llamativas de este año es el Cabildo Abierto. Es itinerante y este será su tercer encuentro. Lo desarrolla Sandra Márquez y Merico lo define como un lugar “donde se reúnen artistas de Tango a repensar el género a intercambiar ideas a pensarlo para que el tango vuelva a tener el amplio espacio que merece”.
La propia Márquez alude al cabildo abierto fundacional de la patria y lo propone como “un encuentro de artistas, gestores, productores y público para reflexionar y debatir sobre el tango. Diferentes áreas artísticas y del pensamiento se entrecruzan para dar nuevos sentidos y reflexiones. Se propone generar y estimular nuevos vínculos, tejiendo redes, preservando lo conquistado, priorizando la equidad de género”. La consigna, señalan, es pensar nuevamente una pregunta importante: ¿qué hacemos por el tango con nuestras voces hoy?
En esa misma línea se encuentran la proyección del documental y las clases, vinculadas en ambos casos al tango queer. “En este documental se retrata otra manera de interpretar esta maravillosa danza rioplatense que se extendió por le mundo, mostrando la paradoja de cómo el tango, una danza tan tradicional y machista, brindó al colectivo de personas LGBTTIQ una herramienta de comunicación, contención y de lucha política inigualable”, explican. Este movimiento encuentra resistencias en sectores conservadores de cada sociedad, pero muy especialmente en ciudades donde la homofobia es una práctica de Estado”.
Para Furio, el tango es un espacio “de intercambio de abrazos tangueros libres” y entiende la reapropiación de una danza tradicional “pero despojándola de esos roles fijos en donde sólo el varón es quien conduce y la mujer siempre quien sigue la pauta”. Para ella es justamente esta modalidad queer en donde la propuesta es el intercambio de roles independientemente del género de quien lo baila lo que “permitió a esta comunidad ser parte de este universo tanguero e incluso sumar esta propuesta también en ámbitos tradicionales, que fueron entendiendo la riqueza de poder dominar los movimientos de ambos roles”.
En cuanto a las resistencias que enfrentan en el sector, Furio destaca que “los sectores conservadores apuntan a una cultura que sostenga los privilegios de unos pocos y que no genere consciencia crítica ni cuestionamientos, por eso siempre hay sectores que tienen una enorme resistencia ante expresiones populares que transiten por fuera de la norma”, reflexiona Liliana Furio. Y señala: “Para nosotrxs, el arco de la cultura tiene que ser transversalmente diverso e inclusivo, en particular el tango, que nació en los arrabales del pueblo y para el pueblo, porque por eso decimos que el tango será popular, o no será nada”.