Tras un plenario con mas de mil delegados, la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) ratificó el paro de 24 horas para este miércoles con ingreso masivo a ministerios y organismos del Estado en todo el país y en respuesta a los despidos en la administración pública que el gremio contabilizaba hasta ayer en 11 mil trabajadores.
“No vaya a ser cosa que el Presidente y sus funcionarios terminen presos por las cesantías masivas. Se están cometiendo delitos penales”, sostuvo el secretario general de ATE Nacional, Rodolfo Aguiar, en una carta abierta a Javier Milei. Y advirtió: “Como son peligrosos y despiadados, anticipamos nuestro repudio a cualquier hecho de represión que desde la Casa Rosada se pudiera ordenar”. Daniel “Tano” Catalano, secretario general de ATE Capital —ámbito en el que se produjo casi la totalidad de los despidos— confirmó a PáginaI12 que hay previstas para las 9 de la mañana asambleas simultáneas en 16 sectores de trabajo, entre ellos, los más afectados como el Ministerio de Capital Humano y la degradada Secretaría de Trabajo y donde debatirán profundizar la acción de fuerza con un nuevo paro para el viernes en las dependencias estatales de la Ciudad.
ATE Nacional definió tres franjas horarias para los ingresos masivos a ministerios, organismos y dependencias estatales: a las 7, 8 y 9 de la mañana, de acuerdo al funcionamiento habitual de cada delegación. Los ingresos serán hechos por trabajadores de planta permanente, los contratados que no han sido despedidos y los que ya fueron notificados de su cesantía.
En una carta abierta dirigida a Milei y publicada ayer en la red social X (ex Twitter) Aguiar destacó la medida que llevarán adelante en todo el país: “Tenemos que demostrar que es el Gobierno el que actúa al margen de la Constitución y de la ley —dijo—. Los trabajadores con nuestros ingresos masivos y simultáneos estaremos ejerciendo nuestros derechos de huelga, manifestación y reunión. Si hay violencia y represión, la única responsable será la Casa Rosada”.
El monitoreo de despidos que realiza el gremio contabiliza más de 11 mil. “Despedir tantos trabajadores a tal punto que hasta delegaciones enteras tienen que cerrar, como ocurrió con Anses, restringe de manera grave el derecho a la seguridad social, y lo mismo empieza a ocurrir con otros servicios esenciales que el Estado está obligado a brindar: educación, salud, seguridad alimentaria y hasta la posibilidad de prevenir catástrofes, cuestión ahora afectada porque el recorte alcanzó hasta el Servicio Meteorológico Nacional”, agregó el dirigente estatal.
“Por otro lado, esta decisión gubernamental violenta pactos internacionales que también tienen rango constitucional", explicó. Y recordó que el Pacto de Derechos Económicos, Sociales y Culturales que se aplica a partir del Protocolo de San Salvador, en su artículo seis obliga a los Estados a defender el trabajo e impulsar el pleno empleo. "Y esto precisamente no es lo que está ocurriendo”, continuó. En esa línea, finalmente sostuvo que “el Presidente ha decidido quebrantar el sistema jurídico argentino en su parte medular. Provocar cesantías masivas en el Estado es suprimir derechos fundamentales y esa es una conducta tipificada en nuestro Código Penal”. Y apuntó: “No vaya a ser cosa que el Presidente y sus funcionarios terminen presos antes de lo que cualquiera pudiera imaginar”.
Capital
En tanto ATE Capital tiene previstas asambleas simultáneas en 16 áreas de trabajo, las más afectadas por los despidos masivos. Las concentraciones más importantes se esperan en Capital Humano y el exministerio de Trabajo, cuyo titular ahora es el abogado del Grupo Techint, Julio Gabriel Cordero, quien formalizó los centenares de despidos desde su nuevo sillón de funcionario. “Vamos a realizar las asambleas en los lugares de trabajo. Si la policía o las fuerzas de seguridad nos impiden el ingreso, las haremos en la puerta. No vamos a dar ninguna señal que justifique cualquier situación de violencia contra los trabajadores estatales”, dijo Catalano a PáginaI12. “Allí vamos a discutir la profundización de un plan de lucha que continuaría con otro paro el viernes de ATE Capital en demanda de la reincorporación de los trabajadores despedidos”.
En la delegación porteña se concentra la casi totalidad de los despidos. "No están despidiendo ‘ñoquis’ —dijo Catalano— sino trabajadores de hasta 25 años de antigüedad, compañeros y compañeras de planta permanente, que tienen su certificación de discapacidad o compañeras embarazadas. Todos ellos cumpliendo roles y funciones”. También agregó que quienes dicen que "están atacando a los ñoquis de La Cámpora" forman "un relato fantástico para tratar de demonizar al empleado público".