Desde tiempos ancestrales, la trayectoria de Mercurio retrógrado fascinó a observadores del cielo y entusiastas de la astrología. Sin embargo, ¿qué significa realmente este fenómeno astronómico que estará presente gran parte del mes y cómo evolucionó su interpretación a lo largo de la historia?
El fenómeno planetario con pésima fama, que ocurre desde el 1º y hasta el 24 de abril, tiene su explicación científica, pero también sus "mitos astrológicos". Para aclarar de qué ese trata este proceso que genera inquietud en la población -que va desde posponer firmas, compras o viajes, hasta atribuirle estados de ánimos-, la NASA explicó qué sucede realmente cuando el planeta mas cercano al sol comienza esta fase.
En primera instancia, y para comenzar a clarificar el tema, desde el organismo espacial norteamericano explicaron que Mercurio no se mueve hacia atrás en su órbita alrededor del Sol durante su fase retrógrada. Más bien, este fenómeno es una ilusión óptica causada por la variación en la velocidad orbital de los planetas, según precisaron desde la NASA. En este sentido, señalan que Mercurio retrógrado ocurre cuando, desde la perspectiva de la Tierra, el movimiento aparente del planeta parece desacelerar y revertir su dirección.
El fenómeno de retrogradación de Mercurio a lo largo de la historia
Las primeras observaciones documentadas de Mercurio retrógrado datan del siglo VII a.C., realizadas por astrónomos babilonios. Estos antiguos científicos grabaron detalladamente los movimientos planetarios en tablas de arcilla, notando cómo Mercurio parecía ralentizarse y cambiar de dirección. Para los babilonios, los cuerpos celestes como Mercurio eran manifestaciones de los dioses y sus movimientos tenían profundos significados simbólicos.
Con el paso de los años, se comenzó a asociar a la astrología con la astronomía, y a comparar movimientos planetarios con actitudes cotidianas se convirtió en una práctica cada vez más popular en Europa. Sin embargo, el avance del pensamiento científico durante el Renacimiento y la era de la Ilustración llevó a un distanciamiento gradual de la astrología como disciplina científica. El modelo heliocéntrico propuesto por Copérnico y las observaciones de Galileo desafiaron las creencias astrológicas arraigadas, y la astrología perdió terreno frente a la astronomía.
Aunque la astrología tradicional disminuyó en influencia, el interés en los fenómenos astrológicos como Mercurio retrógrado resurgió en el siglo XX. Las columnas de horóscopos en los diarios y la popularización de la astrología en la sociedad contribuyeron a este resurgimiento. Hoy en día, Mercurio retrógrado ganó relevancia como un tema de interés popular, a menudo asociado con problemas de comunicación y malentendidos en la vida cotidiana.
La ilusión óptica y los problemas de comunicación
Desde el punto de vista científico, Mercurio retrógrado es simplemente una ilusión óptica causada por la dinámica orbital de los planetas. Los astrónomos y científicos insisten en que no hay evidencia creíble que respalde la idea de que los movimientos planetarios tengan un impacto directo en la vida de las personas. La interpretación astrológica de estos eventos se basa en tradiciones ancestrales y no en observaciones científicas verificables.
Aunque Mercurio retrógrado puede seguir siendo un tema de interés para algunos, es importante distinguir entre la ciencia y la creencia popular. Mientras que la astronomía ofrece explicaciones basadas en evidencia empírica, la astrología se basa en interpretaciones subjetivas y suposiciones no probadas. Entender el fenómeno de Mercurio retrógrado desde una perspectiva científica puede ayudar a separar los mitos de la realidad en nuestro entendimiento del cosmos.