En el marco del histórico brote de dengue que atraviesa el país, el ministro de Salud, Mario Russo, ratificó que no se va a incluir la vacuna en calendario de inmunización, delegó la responsabilidad a las provincias y municipios de llevar "la fase operativa" para la prevención y control de casos, y aseguró: “No creemos que el Ministerio de Salud sea un supermercado para mandarle a los gobernadores, intendentes y ministros de salud de cada región distintos productos”.
Con un total de 180 mil casos y 30 muertes por la enfermedad confirmados, Russo se refirió al accionar del Estado Nacional frente al brote y sostuvo: “Cuanto antes entiendan los gobernadores y los ministros de Salud provinciales que es su responsabilidad llevar adelante la fase operativa de las políticas de salud públicas, vamos a tener resultados mucho mejores”. “Nosotros ejercemos la rectoría, marcamos el rumbo y bajamos guías prácticas de las políticas de salud pública. Tendrían que preguntarle al (intendente de la Matanza, Fernando) Espinoza también, a todos los intendentes y a los gobernadores”, aseguró en una entrevista con la señal TN.
Russo añadió que tuvo una reunión con los 24 ministros de Salud y les dijo que son “los protagonistas” para “que la salud mejore” y deben colaborar con cartera que marca el camino. “Es más fácil para un ministro de Salud de la provincia darse vuelta y pedirle al Ministerio de Salud de la Nación. Pero tienen que discutir con su gobernador, que lo votó la gente, para que vea cuáles son las prioridades”, remarcó.
El mismo jueves por la tarde se conoció la noticia de que el Gobierno abrirá la importación de repelentes a través de la suspensión durante 30 días de la intervención por parte de la ANMAT. En ese sentido, el ministro dijo: "Estamos en comunicación permanente con los proveedores de repelentes. Hoy lo que se habilita es la compra puerta a puerta para la gente. Desde que llegamos al gobierno, el Ministerio de Economía liberó las trabas para importar, no solo insumos, sino también productos terminados".
Russo explicó que en los últimos días se vio obligado a dar entrevistas y salir en los medios para hablar sobre la situación del dengue porque lo “aprietan”. “En la salud también hay intereses. Estoy saliendo hace cuatro días desde la mañana hasta la noche porque aprietan los laboratorios, los medios y la casta”, afirmó.
El miércoles por la noche, en otra entrevista, el ministro fue consultado sobre la reposición de los repelentes en las góndolas, ante lo cual respondió: “Es muy difícil decir con la información que nosotros tenemos. Esto es coyuntural y se va a resolver, probablemente, en las próximas dos semanas”.
Sobre la eficacia de la vacuna, el ministro aseguró que la misma “es segura y eficaz”. Pero insitió en la postura oficial: “Como ministro de Salud, tengo la responsabilidad de tomar una decisión sobre el calendario de inmunización. Lo que nosotros dijimos es lo que recomienda la OPS (Organización Panamericana de la Salud), lo que nos aconseja la Comisión de Inmunización y nuestros expertos. La vacuna no es una herramienta para mitigar el brote. La decisión es personal de cada habitante con su médico de cabecera, ya que hoy necesita prescripción médica”.