De acuerdo con una medición privada, las transferencias nacionales no automáticas a provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (Caba) habrían caído 86 por ciento interanual en el primer trimestre del año, medidas a valores constantes. Un recorte excepcional para una partida que en total no alcanza a representar un uno por ciento del PBI. El Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf) destacó además que ese trimestre todas las jurisdicciones tuvieron una caída interanual real en el gasto pagado, con la excepción de CABA con un incremento del 7,5 por ciento.

En el primer trimestre del año el gasto efectivamente pagado en concepto de transferencias no automáticas a provincias habría sido equivalente al 32 por ciento del gasto devengado, según este informe privado. Así, la deuda flotante de Nación con las provincias ascendería a 164.000 millones de pesos y enciende dudas respecto si el Gobierno podrá seguir evitando los pagos. Aproximadamente en un mes y medio, el presidente querrá firmar con los gobernadores su Pacto de Mayo "fundacional" que sentaría las bases de "una nueva Argentina". Pero las negociaciones están poco avanzadas y restan definir varios aspectos de la letra chica.

El tironeo por la derogación de los requerimientos legales para la transferencia automática del dinero desde Anses a las cajas previsionales provinciales fue el último capítulo de una saga en la que los gobernadores solo parecen ganar incertidumbre. De acuerdo a los datos del Iaraf, en marzo de 2024 las provincias recibieron 56.000 millones de pesos –como crédito pagado-, lo cual implica una caída interanual nominal del 29,7 por ciento y una caída real del 82 por ciento. Si se considera el gasto devengado, la baja nominal fue del 18 por ciento y del 79 por ciento en términos reales. Son números excepcionales que dan cuenta de un recorte prácticamente a cero en estas partidas.

En marzo todas las jurisdicciones tuvieron una caída interanual real en el gasto pagado con las excepciones de CABA (80 por ciento arriba en términos reales) y Santa Cruz (11,3 por ciento). El incremento registrado en CABA es muy llamativo. El informe también destacó que por primera vez en el año todas las provincias recibieron al menos un millón de pesos. En efecto, La Rioja recibió dinero por primera vez en el año (alrededor de 55 millones de pesos).

En tanto, en el trimestre la caída real de las transferencias no automáticas fue del 86 por ciento interanual y todas las jurisdicciones registraron contracciones, con la excepción de CABA con 7,5 por ciento positivo. Las mayores caídas se observaron en La Rioja (99,8 por ciento), San Luis (99,5 por ciento), y La Pampa (98,9 por ciento). Como se dijo, durante el primer trimestre del año el gasto pagado habría sido equivalente al 32 por ciento del gasto devengado, de modo que la deuda flotante con provincias y CABA ascendería a 164.000 millones de pesos.

Un informe anterior del Iaraf con datos para el primer bimestre del año mostraba que las transferencias nacionales automáticas por coparticipación y demás conceptos alcanzaron en el período 4.500.000 millones de pesos, que medidos en moneda constante implicaban el menor monto para un primer bimestre de los últimos 9 años y una caída real interanual del 15,4 por ciento. Esto como consecuencia de la licuación de todas las partidas del gasto y a la merma en la recaudación por la desaceleración de la actividad económica. En medio de la discusión por el recorte de las transferencias de fondos, automáticos y no automáticos, uno de los puntos de mayor controversia entre Nación y provincias es la reversión del impuesto a las Ganancias.