El Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) falló el martes en favor de un grupo de mujeres suizas que había demandado a su gobierno por unos esfuerzos "lamentablemente inadecuados" en la lucha contra el cambio climático. El TEDH sentenció que el Estado había violado algunos derechos humanos al incumplir objetivos de reducción de emisiones.
Para las integrantes del grupo (a las que un informe de la agencia de noticias Reuters calificó de "ancianas"), el accionar del gobierno las dejaba en riesgo de morir durante olas de calor. La demanda fue presentada por Verein Seniorinnen Schweiz, una asociación formada por más de 2.000 mujeres, en su mayoría mayores de 75 años, que se quejan de que sus problemas de salud se ven agravados durante las olas de calor cada vez más recurrentes por el calentamiento global, y que eso tiene un impacto considerable sobre sus condiciones de vida.
La decisión del tribunal europeo sobre el caso, presentado por más de 2.000 mujeres, podría tener un efecto dominó en toda Europa y más allá, según la interpretación del medio con sede en Londres. Indica el cable que el fallo sienta un precedente sobre cómo algunos tribunales abordan la creciente ola de litigios climáticos argumentados sobre la base de violaciones de derechos humanos.
La presidenta del tribunal, Siofra O Leary, sostuvo que el gobierno suizo había violado el derecho humano a la vida privada y familiar al no implementar suficientes políticas internas para abordar el cambio climático. "Esto incluyó la falta de cuantificación, a través de un presupuesto de carbono o de otra manera, de las limitaciones nacionales de emisiones de gases de efecto invernadero", planteó O Leary en la sala del tribunal.También señaló que el gobierno suizo no había cumplido sus objetivos anteriores de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero al no implementar medidas para garantizar que se alcanzaran los objetivos.El movimiento cívico global Avaaz opinó que el fallo del tribunal había abierto un nuevo capítulo en el litigio climático. "El fallo suizo sienta un precedente legalmente vinculante y sirve como modelo para demandar con éxito a su propio gobierno por fallas climáticas", señaló Ruth Delbaere, directora de campañas legales de Avaaz.
Casos similares
Sin embargo, el tribunal desestimó otros dos casos similares, el primero presentado por seis jóvenes portugueses contra 32 gobiernos europeos y el otro por un exalcalde francés contra el de su país. "Realmente esperaba que ganáramos contra todos los países, así que estoy decepcionada porque no fue eso lo que pasó", se lamentó en un comunicado Sofá Oliveira, una de las jóvenes portuguesas demandantes.
Pero no se desanimó y acotó: "Lo más importante es que el tribunal dijo en el caso de las mujeres suizas que los gobiernos deben reducir más sus emisiones para proteger los derechos humanos. ¡Así que su victoria es una victoria para todos!":
El veredicto en el caso suizo, que no puede ser apelado, podría obligar al gobierno a tomar mayores medidas para reducir las emisiones, incluida la revisión de sus objetivos de reducción de emisiones para 2030 para alinearse con el objetivo del Acuerdo de París de limitar el calentamiento a 1,5 grados Celsius.
El Tribunal de Estrasburgo ha abierto una vía innovadora en su jurisprudencia al considerar que se puede pedir cuentas a un Estado por inacción y por no aplicar políticas para atenuar el cambio climático, en la medida en que está afectando a los derechos humanos de los ciudadanos.
Aunque el TEDH reconoce que solo es competente para juzgar sobre la base del Convenio Europeo de Derechos Humanos, recuerda que los países europeos han suscrito otros compromisos internacionales, como los Acuerdos de París de 2015 para limitar el calentamiento global a menos de 2 grados centígrados, y que hay "informaciones científicas incontestables" sobre el cambio climático y sus consecuencias.
Entre otros, que "los esfuerzos mundiales actuales en materia de atenuación no bastan para garantizar la realización de ese objetivo", y eso teniendo en cuenta que "la insuficiencia" de lo hecho hasta ahora por las autoridades públicas "tiene como consecuencia agravar los riesgos de consecuencias negativas y las amenazas (...) para el disfrute de los derechos humanos".
Por eso, aunque evita prescribir políticas concretas sí afirma que "los Estados deben poner en marcha la reglamentación y las medidas necesarias para prevenir (...) una elevación de la temperatura media del planeta a niveles que pudieran tener repercusiones graves e irreversibles para los derechos humanos".
La sentencia contra Suiza implica una obligación legal para corregir las violaciones constatadas en el caso de esta asociación de mujeres dentro de un "margen de apreciación" de las propias autoridades de ese país, pero "bajo la supervisión" del Comité de Ministros del Consejo de Europa.
La activista ambiental sueca Greta Thunberg, que había acudido a Estrasburgo en apoyo de los jóvenes portugueses, prefirió dejar de lado esa demanda (que fue desechada) y subrayar, a preguntas de EFE, el avance que para su causa supone la sentencia contra Suiza.
"Muestra la responsabilidad jurídica que tienen los Estados europeos hacia sus ciudadanos, pero también hacia la gente en general. Porque, por supuesto, la crisis climática no tiene fronteras", declaró Thunberg.