Finalmente, se oficializó la renuncia del secretario de Articulación Federal, Sebastián García de Luca, quien había dimitido por diferencias con la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich. Su salida del ministerio ocurrió en los hechos en plena pelea de Javier Milei con los gobernadores patagónicos y, en especial, con el de Chubut, Ignacio Torres, que pertenece al PRO. García de Luca expresó sus diferencias con esa estrategia del Ejecutivo y con el acompañamiento militante que le hizo Bullrich y se alejó. Se fue a trabajar con el gobernador de Entre Ríos, Rogelio Frigerio. Desde entonces, Mauricio Macri consiguió la presidencia del PRO, pero el partido sigue dividido en tres.
Se conoció en el Boletín Oficial el decreto 300/2024, firmado por el presidente Milei y la ministra Bullrich, que acepta la renuncia de García de Luca a partir del 1° de marzo de 2024 y le agradece "los valiosos servicios prestados en el desempeño de su cargo".
Como informó este diario, la salida de García De Luca fue parte del conflicto con los gobernadores. Bullrich había exigido la firma de un documento cuestionando a los mandatarios del PRO y De Luca se negó, luego de que el gobierno nacional le descontara un tercio de la coparticipación mensual a Chubut. Más tarde, un fallo judicial ordenó restituir esa coparticipación.
García de Luca se despidió con un tuit que intentó ser cordial, pero dejó algunas señales: "Un placer acompañarte hasta acá. Gracias por tu confianza. Sos una gran dirigente y mejor persona. Sigo convencido del cambio que necesita nuestro país, con responsabilidad, respeto y federalismo", remarcó. A nadie se le escapó que el mensaje terminó con las palabras "respeto" y "federalismo" que los gobernadores PRO recalcan ante los embates de Milei.
De Luca venía trabajando con Bullrich desde la campaña, cuando Emilio Monzó y otros dirigentes afines se ocuparon de cuestiones de organización logística y de tender contactos políticos para la entonces candidata a presidenta. Llegó a ser jefe de campaña en la provincia de Buenos Aires de Bullrich. Se alejaron así de la línea larretista, que resultó perdedora en la interna.
Cuando Bullrich llegó a Seguridad, lo llevó a De Luca como secretario de Articulación Federal. Es decir, que su tarea era entablar diálogo con los gobiernos provinciales e intendencias. Se trata de un funcionario con perfil dialoguista que cumplió ese papel con los gobernadores durante el gobierno de Macri, cuando formaba parte del Ministerio del Interior que conducía Frigerio.
Su relación siempre fue con Frigerio y con los gobernadores, por lo que no resulta rara su salida en un contexto en el que Bullrich se embanderó como soldado en la lucha de Milei contra las provincias. “Asistimos hoy consternados a la resistencia de muchos gobernadores a compartir el esfuerzo fiscal necesario para impedir una crisis hiperinflacionaria cuya víctima principal no sería el gobierno sino los argentinos que habitan todas las provincias”, les enrostró Bullrich a los gobernadores PRO.
Cuando De Luca anunció su salida, Bullrich reconoció en una entrevista radial que el motivo era que, por su perfil más dialoguista, tenía serias diferencias con el estilo de Milei: "Llevamos adelante una práctica de a todo o nada. Y él tenía cierta incomodidad". Y De Luca también confirmó entonces ante Página/12 que el motivo de su salida fueron esas diferencias: "Patricia tiene un convencimiento muy grande de que lo que está haciendo Milei es el camino que hay que seguir y está muy comprometida en esta pelea con los gobernadores. Yo siempre voy a colaborar con el cambio, pero los métodos que están utilizando no me convencen. Por lo tanto, no puedo continuar con mi rol en el ministerio".
Desde la salida de De Luca, Bullrich se decicó a evitar nuevas fugas de su ministerio. Pero perdió la batalla general contra Macri, que se hizo con la presidencia del PRO y buena parte de los cargos de conducción partidaria. El sector encabezado por Horacio Rodríguez Larreta se negó a ocupar cargos en esa conducción y está cada vez más afuera del PRO. En ese contexto, oficializaron la salida de De Luca.