Durante el fin de semana concluyó la 9º Edición del Festival Internacional de Cine de las Alturas, que se desarrolló entre el 6 y el 13 de abril en Jujuy, con decenas de exhibiciones, talleres y otras propuestas.
Así, en el último día del evento, se anunciaron y proyectaron las piezas ganadoras de este año. “Cambio cambio”, de Lautaro García Candela, fue reconocida en mejor guión y mejor película “por contar una historia de antihéroes urbanos, con un pulso fresco”. A su vez, el film boliviano “Los de Abajo”, de Alejandro Quiroga, consiguió una mención especial. El lauro del público fue para la película venezolana, "One Way", de Carlos Daniel Malavé, y la chilena “1976” se impuso en las categorías de Mejor directora y fotografía, para Manuela Martelli y Soledad Rodríguez respectivamente.
Asimismo, en la sección Cortos NOA, la jujeña Julia Carrizo se destacó con su obra “Hermanas del viento”, señalada como Mejor Cortometraje y el premio del público. En paralelo, el riojano Fernando Bermúdez logró una mención especial por “Los Anillos de Saturno”, mientras que en la competencia internacional de documentales, el premio fue para "Zapla, los hijos del Óxido" del realizador jujeño Hernán Paganini.
Tras ocho días de celebración para el séptimo arte, que incluyó proyecciones gratuitas en toda la provincia de Jujuy y funciones online para todo el país, Jimena Muñoz, productora general del Festival Internacional de Cine de las Alturas, repasó algunos de los puntos fuertes de este proyecto que congrega a cinéfilos y cinéfilas de la región.
-¿Cuál es el balance que hace de la última edición del Festival que concluyó el sábado?
-El balance es muy positivo, fue una novena edición esperada por el público que nos acompañó y llenó las salas de cine. Hubo mucha concurrencia en salas y ese es el mejor balance que tenemos.
-¿Qué aportes encuentra en las historias que fueron premiadas para la identidad nacional y regional/andina?
-Un aporte a la cultura, a la identidad. Estas películas premiadas son parte de nuestras historias. La película ganadora de ficción, “Cambio cambio”, tiene una identidad nacional, llevando a entender parte de nuestra idiosincrasia económica y política, desde la ficción. Por otra parte, “Zapla los hijos del óxido”, documental ganador de esta edición, es de gran valor y con un aporte a la memoria por los antecedentes políticos e históricos. Este festival es importante para la región, cada relato es una forma más de descubrirnos y entender parte de esta coyuntura actual.
-Una de las actividades de formación proponía alternativas para esquivar la motosierra ¿cómo repercutió la actualidad de nuestro país en la realización de este evento?
-También repercutió en el evento. Adaptamos la novena edición y logramos ajustar sin perder la calidad, y con mucha gestión y aportes pudimos concretar 8 días, con más de cien obras audiovisuales y charlas y talleres y actividades especiales
-Hubo películas especiales enfocadas en el medio ambiente, en la cultura canábica, en accesibilidad, en género, entre otros puntos, ¿qué criterios se manejaron para del diseño de la grilla del festival?
-El criterio es la diversidad, el pluralismo de voces y miradas. Cada película de las secciones paralelas está planificada de acuerdo a los contenidos que demandan el espectador y el contexto social. Como es el caso del cine ambiental, con la urgencia de transmitir un mensaje de cuidados, lo mismo con el cine con perspectiva de género y diversidades, esta selección también plantea una temática que necesita difundir nuevos relatos, contar historias que antes no tenían espacio o realización. Además, la sección de accesibilidad es, sin lugar a dudas, un avance en lo que respecta la inclusión y efectivamente en lo que implica ser un festival apto para todo público, con películas para personas sordas, no videntes y para todas aquellas que no pueden acceder a los contenidos tradicionales en el cine. Trabajamos la grilla de las secciones paralelas con mucha responsabilidad e involucramos diferentes instituciones que nos ayudan con la curaduría y la selección de los films para cada sección.
-Según palabras del gobernador Carlos Sadir, este es el encuentro “cinematográfico más grande de la región” y pone “ luz sobre la inmensa calidad e importancia de la industria audiovisual andina, que no solo produce contenido de alto nivel, sino que también genera miles de puestos de trabajo”. En esa línea ¿cómo impactan las políticas recientes en la en esa industria cultural?
-Si bien estamos ante un panorama nacional complicado, desde la provincia se sigue apostando a las industrias culturales que impactan de manera positiva, generan desarrollo, por ejemplo, en la actividad audiovisual que es productiva, además de cultural y artística, e impacta en diferentes rubros como la economía, el turismo, la gastronomía, los servicios de producción, los recursos técnicos y humanos entre otros rubros. Esta industria, en estos últimos años, tuvo un exponencial crecimiento y lo vimos con nuestras películas, resultado del trabajo que venimos haciendo desde el festival y el IAAJ, Instituto de Artes Audiovisuales de Jujuy. También, desde la escuela ENERC (Escuela Nacional de Experimentación y Realización Cinematográfica), como semillero de realizadores, con los laboratorios e instancias de capacitación y armado de proyectos, el fomento para la producción y la exhibición. Esta puesta en marcha de la industria, año a año crece y Jujuy se convierte en un polo de producción y difusión audiovisual.
-Las películas premiadas se encuentran disponibles en la web del Festival ¿cuál es el mecanismo de acceso a esos materiales?
-Las ganadoras se proyectaron en salas, el sábado estuvimos en la sala con el director y la directora de Jujuy, Hernán Paganini y Julia Carrizo. También desde la 00 del sábado se pudieron ver las películas en la web del Festival. Esa sala virtual en la que muchos argentinos y argentinas pudieron formar parte de esta edición. Además, es una adaptación para los espectadores que prefieren no visitar la sala, incorporar contenidos en la plataforma, y ya lo venimos haciendo desde el 2020, con grandes resultados.
-¿Cómo evalúa la recepción del público, especializado y amateur, de las piezas que se exhibieron durante la novena edición?
-La recepción fue positiva por el público que asistió a las salas. Además, cabe destacar que la región y Jujuy se apropiaron de este evento, con gran cantidad de asistencia a cada encuentro, taller o película. Esto nos entusiasma para seguir trabajando y sostener el espacio, con este abrazo de la industria y el público en general.