Todo el personal profesional y no profesional, docente y no docente, amaneció en las inmediaciones del Instituto de Oncología Angel H. Roffo formando parte de un abrazo simbólico en medio de los embates del Gobierno y la quita histórica de presupuesto a los hospitales universitarios.
En concreto, la manifestación –que se hace sin interrumpir la atención en el centro de salud– tiene cuatro claras consignas: decirle sí a la docencia e investigación, a la educación pública gratuita y a los hospitales universitarios y no al desfinaicmiento de la Universidad de Buenos Aires.
Consultado por esta medida, Sergio Gianni, director a cargo del área quirúrgica del Roffo, explicó que la decisión se tomó ya que, con el actual presupuesto, “cada vez cuesta más sostener un nivel de atención adecuado”.
“En este momento, en el instituto se está llevando a cabo un abrazo por parte de todos los profesionales y no profesionales para visibilizar una situación de gravedad que está atravesando todos los hospitales que dependen de la UBA”, señaló entre la pregunta de Víctor Hugo Morales.
Sin ir más lejos, días atrás la propia UBA se declaró en emergencia presupuestaria y los hospitales universitarios advirtieron por el brutal ajuste al que son sometidos con el recorte presupuestario y le exigieron al gobierno de Javier Milei una respuesta para sostener los tratamientos e investigaciones.
Como punto clave en esta lucha universitaria en todo el país, el Consejo Superior de la UBA decidió adherir y convocar a la Marcha Federal Universitaria, en defensa de la educación y del sistema universitario público argentino, que se realizará el día 23 de abril.