La Corriente Clasista y Combativa (CCC) denunció que alrededor de 4 mil chicos no han comenzado la escuela en todo el Gran Rosario. En ese marco, este martes presentaron un petitorio en la sede local del Ministerio de Educación provincial solicitando que se entreguen materiales escolares e indumentaria necesaria para ayudar en la escolarización infantil y juvenil. “Queremos facilitar de alguna manera la posibilidad de que los pibes no abandonen la escuela. Entendemos que es prioritario en este momento y vimos oportuno hacerlo en el día en que todo el país salió a defender la educación pública”, explicó Eduardo Delmonte, referente del organismo. “Una forma de cortar el círculo vicioso de la criminalidad es que los pibes tengan más oportunidades de acceder a la escuela”, añadió en diálogo con Rosario/12.
Este martes por la mañana la CCC concentró en las inmediaciones de Junín y Thedy, en la zona del shopping Alto Rosario. Allí se encuentra la sede rosarina del Ministerio de Educación donde la organización social se hizo presente con una denuncia concreta: alrededor de 4 mil chicos y adolescentes del Gran Rosario no están siendo escolarizados. Ante ese escenario, el pedido de la agrupación es que el gobierno provincial intervenga con una ayuda escolar que permita comprar útiles y los elementos necesarios para que los chicos sigan estudiando.
“Venimos con un relevamiento que hicimos el año pasado y nos daba que 4.112 chicos de la región, en edad escolar, no estaban yendo a la escuela. Es un número que incluso habría que actualizar, porque la situación se agudizó”, explicó Delmonte. “Son familias que no tienen posibilidad de mandar los pibes a la escuela. Algunos los mandan con las bolsas de supermercado en lugar de mochilas y algunos realmente no tienen ni zapatillas. Queremos facilitar de alguna manera la posibilidad de que los pibes no abandonen la escuela. Entendemos que es prioritario en este momento y vimos oportuno hacerlo en el día en que todo el país salió a defender la educación pública”, añadió.
Para el dirigente social, el reclamo tiene un trasfondo que genera preocupación en la organización: la posibilidad de que muchos de esos chicos, fuera de la contención escolar, terminen en el circuito de la narcocriminalidad. “Queremos poner en discusión eso. La sociedad está conmovida por un chico de 15 años que ha asesinado a trabajadores y a los gobiernos la única idea que se les cae es bajar la edad de imputabilidad sin atacar el problema de fondo”, cuestionó.
“Conocemos la realidad de los pibes en los barrios y conocemos cómo los pibes son captados en el circuito del narcotráfico donde matan y mueren, o terminan presos, porque la cárcel está llena de pibes pobres. Nadie quiere cortar ese círculo vicioso que nos preocupa. Y una forma de cortarlo es que los pibes tengan más oportunidades de acceder a la escuela y la posibilidad de tener un futuro. Desde ya que con una mochila, una carpeta, o un lápiz no va a alcanzar, pero entendemos que el Estado tiene que jugar un rol activo en ese sentido”, detalló.