Vecinos y vecinas de los departamentos Orán y San Martín, en el norte provincial, y algunos municipios de Anta e integrantes de la agrupación Comerciantes Unidos, de Capital, realizaron ayer 15 minutos de total apagón en protesta por el incremento desmesurado en las tarifas de la energía eléctrica. La protesta difundida en videos que muestran una tenue iluminación generada por linternas o velas.
Uno de los pedidos principales es que la facturación se retrotraiga a valores de enero, antes del incremento decidido por los gobiernos nacional y provincial, dado que los montos que se facturan son imposibles de pagar. Encima, se esperan más incrementos.
Las medidas de protesta continuarán el lunes, cuando se prevé una movilización en la ciudad de Orán, según lo anunció el presidente del Centro de Jubilados de Hipólito Yrigoyen, José Guerrero.
Entre los últimos motivos que pusieron a vecinas y vecinos en alerta, se encuentra el anuncio del gobierno provincial de cubrir por un año el descuento del 30 por ciento de la factura de luz de los comerciantes y empresarios de los departamentos San Martín y Orán. El beneficio se aplicará en principio en el consumo de mayo.
Para el uso domiciliario, en tanto, la medida del descuento del 30 por ciento rige entre noviembre y marzo, por ser el norte una de las zonas cálidas de la provincia y el país, con temperaturas que pueden llegar a los 50°C.
La información con la que cuentan los habitantes de Orán indican que “el abastecimiento se incrementó en un 158% para el cuadro tarifario febrero/24-abril/24 con respecto al cuadro noviembre /23 enero/24”, en lo que respecta a los valores autorizados por la Secretaría de Energía de la Nación. En la provincia se indicó que la autorización del incremento fue del 78 por ciento. Sin embargo, en las boletas, la suba total llegó a ser cercana al 165 por ciento entre las boletas de enero y las de febrero.
En un ejemplo práctico, Josefa Cardozo, vecinas de San Ramón de la Nueva Orán (ciudad cabecera del departamento del mismo nombre), contó que en su casa tiene dos aires acondicionados (que suele prender de noche solamente) y un freezer, como los artefactos que más energía pueden consumir. La boleta de enero llegó a ser de 45.200 pesos aproximadamente, mientras que la de febrero trepó a 104 mil pesos. Ambas tuvieron el 30 por ciento de descuento.
En marzo la factura llegó a 114 mil pesos aproximadamente. Ello porque la energía activa no excedente (o sea menos cara, a 35 pesos por kilowatts), era hasta febrero de 650 kilowatts, mientras que en marzo pasó a ser de 400 kilowatts. El costo de la llamada “energía activa excedente” es de 137 pesos.
“Queremos que las facturas de febrero y marzo se re facturen con costos de enero que todavía se podía pagar, y que no nos corten el servicio bajo ningún punto de vista”, indicó Cardozo al explicar el petitorio que elevaron al gobierno provincial.
A partir de abril el descuento que afrontaba provincia quedó sin efecto y los vecinos (que ya están con demora en los pagos por la imposibilidad de cubrir el monto de las facturas), temen no poder saldar el costo de la factura ya abultada. Además, Cardozo afirmó que para el mes que viene está decidido aumentar la energía en un 25 por ciento más.