El distrito gobernado por Axel Kicillof será una excepción en la implementación obligatoria de la receta electrónica para la compra de medicamentos. Desde la administración provincial aclararon que la Provincia no reglamentará la disposición prevista en el decreto 345/2024 que el Gobierno nacional publicó el pasado 22 de abril. La norma prevé que tanto para la prescripción de estudios como para tratamientos médicos y venta de medicamentos se utilicen recetas electrónicas.
La resistencia del sector farmacéutico
Si bien la premisa del decreto es promover la trazabilidad de las órdenes médicas y, por ende, del tratamiento de los pacientes, desde el Colegio de Farmacéuticos de La Plata aseguran que la eliminación de la receta en papel acarreará inconvenientes porque obliga a los establecimientos a contar con una conexión a internet estable, además de los posibles faltantes de energía eléctrica y la permeabilidad del sistema a posibles hackeos digitales. Agustín Kostiria, presidente de esa institución, aseguró que la nueva disposición “incluye algunos aspectos que avasallan la incumbencia profesional, como el registro de sustitución”. El farmacéutico aseguró que en caso de tener que cambiar de marca ante, por ejemplo, el faltante del medicamento indicado, sería necesario "avisarle al médico antes de llevar a cabo esa medida, situación que hoy se realiza con naturalidad y consentimiento del paciente para acelerar la gestión en la venta del medicamento que tiene las mismas drogas y efectos, pero es de otra marca”. Además, el sector plantea que la nueva reglamentación podrá facilitar el comercio electrónico de medicamentos, algo perjudicial para la salud pública.
El paradigma Milei
De acuerdo con lo publicado en el Boletín Oficial, la nueva modalidad para la prescripción médica electrónica empezará a regir a partir del 1° de julio y será obligatoria, aunque la obligatoriedad termina siendo relativa. La norma prevé que cada provincia y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires coordine la implementación. Además, de ser necesario, cada distrito ajustará la legislación local para adaptar la normativa al nuevo paradigma nacional en términos de prácticas profesionales e incluso sanciones ante la violación de la reglamentación. Sin embargo, la adhesión a la letra del decreto queda a criterio de cada distrito y deja abierta la puerta a que la disidencia de la administración local deje sin efecto la aplicación de la norma, como es el caso de Axel Kicillof quien, con esta decisión, toma distancia una vez más de las políticas nacionales dispuestas por Javier Milei.
El texto del decreto establece que “la receta electrónica y/o digital es el medio obligatorio para la prescripción de medicamentos, órdenes de estudios, prácticas y cualquier otra indicación que los profesionales de la salud consideren pertinentes para sus pacientes, en todo el territorio de la República Argentina, en la medida en que las jurisdicciones locales adhieran”.