Por al menos 30 días, suspendieron las llamadas de los condenados Esteban Alvarado y Claudio “Morocho” Mansilla, quienes actualmente se encuentran alojados en el penal federal de Ezeiza. La decisión del Ministerio de Seguridad de la Nación fue publicada en el Boletín Oficial y establece el plazo de un mes en el que solo pueden usar el teléfono fijo del pabellón para llamar a su defensor. El mismo día se conoció que por decisión de la Cámara Federal de Casación, el líder de la banda de Los Monos, Ariel Máximo “Guille” Cantero, seguirá con restricciones de comunicación desde el penal de Marcos Paz, luego de que se confirmara el rechazo a un habeas corpus presentado por su defensa.

La medida que alcanza a Alvarado y Mansilla --quien por estos días está siendo enjuiciado por la evasión de presos de Piñero, en 2021-- lleva la firma de la ministra de Seguridad Patricia Bullrich y contempla que después de los 30 días de aplicación se realice una consulta ante la fiscal general del Ministerio Público de la Acusación, María Cecilia Vranicich, para resolver si se prorroga.

De acuerdo a lo expresado en el texto, la restricción de ambos tiene que ver con los hechos violentos que tuvieron lugar durante el año en curso. Se trata de los ataques cometidos en marzo pasado que tuvieron como víctimas a trabajadores. En la audiencia, fiscales a cargo de las causas indicaron que uno de los gatilleros recibió una videollamada desde el penal de Ezeiza. Si bien ambos fueron mencionados durante la audiencia por los crímenes y atentados, desde el Ministerio Público de la Acusación señalaron que por el momento no hay indicios o evidencia que permita imputarlos por la presunta planificación de algunos de los ataques.

Tanto Alvarado como Mansilla están presos y condenados a penas de prisión perpetua por homicidios y por causas relacionadas con el narcotráfico.

En el caso de "Guille", las restricciones habían sido ordenadas por el juez federal de Morón, Jorge Rodríguez, ante un pedido de la Procuraduría de Narcocriminalidad (Procunar). Esa medida también alcanzó a su sobrino Ariel Luciano "Lucho" Cantero, preso por diferentes causas.

El magistrado tomó el informe de la Procunar, en el que se consignó que "aún con las medidas de seguridad complementarias y específicas aplicadas no se logró menguar la actividad que se proponía desbaratar". Allí señalan que el líder de Los Monos y su sobrino fueron "ingeniándose para eludir las limitaciones impuestas con el propósito de continuar comandando la estructura narcocriminal que los tiene como cabecilla y por la cual cumplen condena de prisión". 

Ante ello, la defensa de Cantero presentó un habeas corpus que fue rechazado en primera instancia. Ahora, la Cámara ratificó el rechazo.