La pregunta fue simple: “¿Qué le diría a ella?”. En la última entrevista que brindó, a Javier Milei le preguntaron no una, sino ocho veces qué respuesta tiene para dar a quienes pagan el costo del ajuste y los recortes. Pero el Presidente no pudo responder la pregunta
La primera vez llegó con una descripción. La entrevistadora, Ione Wells, de la BBC, le preguntó por el caso de una jubilada que, entre lágrimas, aseguró el ajuste fiscal lo están pagando los sectores más vulnerables y no la tan mencionada "casta", como insiste el gobierno en su relato.
La pregunta al Presidente fue simple: “¿Qué le diría a ella?”. Y la respuesta, no tanto: “Bueno, la verdad es que eso es falso, que el ajuste más grande lo está pagando la corporación política”. Sin mensajes para la jubilada, el mandatario avanzó con una catarata de datos más que llamativos. Dijo, por ejemplo, que cuando asumió el poder la economía argentina tenía "déficits gemelos por 17 puntos del PBI" e insistió en el inverosimil relato de que la inflación "viajaba al 7.500 por ciento anual". "En diciembre, la inflación mayorista estuvo en el 54 por ciento, que anualizado es 17 mil por ciento", lanzó.
Cuando a Milei le insistieron en que el superavit fiscal celebrado semanas atrás es en base al recorte a las jubilaciones y pensiones, el presidente lanzó: "Eso es falso. Son críticas infundadas".
“Pero, específicamente, ¿qué le diría a esta jubilada y a las personas que están luchando contra los aumentos de precios?”, le consultaron al mandatario. Y, de nuevo, no hubo respuesta: “Bueno, pueden mirarlas en dólares, y de ser de US$80, pasaron a ser de US$200. ¿A dónde está el ajuste, entonces?”.
La entrevistadora retomó sus palabras y volvió a preguntarle, una vez más, qué le diría a todos aquellos que sienten que son ellos quienes están pagando el ajuste. Y lejos de un mensaje al pueblo, el ataque a los medios de comunicación no se hizo esperar. “Lo que pasa es que, en el escenario alternativo, estarían ganando US$10. A veces, desde los medios de comunicación se miente intencionadamente y la gente toma esas mentiras que surgen de los medios”.
“Pero la gente en las calles no son economistas. ¿Qué les diría a las personas que han visto que el precio de la leche se ha duplicado desde que usted llegó al poder y que sienten que están pagando por el ajuste?”, le repreguntaron. En un doble giro, Milei demostró no solo estar desconectado, sino también estar conectado a datos económicos más que peculiaries. “Bueno, de hecho, ya en el último mes los salarios empezaron a ganarle a la inflación, porque subieron 14% y la inflación fue del 11%”.
Lo que el Presidente ocultó en esta respuesta es que la inflación acumulada solo en 2024 ya llegó a 66,2% y que en los primeros cuatro meses de Gobierno las políticas de Javier Milei generaron que más de tres millones de argentinos cayeran en la pobreza, según estimaciones de la Universidad Di Tella.
Entonces, llegó una nueva repregunta, otra vez, simple. Cuál es el mensaje para la gente. A esta altura, ya la periodista le dio algunas líneas: “¿Es que aguanten un poco más?”.
Y, todavía, el mensaje a la gente siguió sin aparecer: “A ver, lo primero que hay que entender es que usted en economía no tiene milagros. Lo más fácil, ¿qué era? Seguir como el gobierno anterior, imprimiendo billetes. Bueno, usted iba a generar inflación y lo que va a hacer es golpear a los más vulnerables”.
Tras otro largo derrotero de números y escenarios de catástrofe imposibles de verificar, llegó la quina y última repregunta de la entrevistadora: “Entonces parece que el mensaje a esas personas es simplemente esperar un poco más”. Y el mensaje del presidente, al pueblo, sin aparecer: “Usted no puede hacer magia”.