Guillermo Banchini, Pablo Trevisán, Iván Brajkovic y Ariel Benvenuto se acomodaron en silencio frente a las cámaras y los micrófonos de los medios que se habían dado cita en el consulado argentino de Nueva York para escuchar a los sobrevivientes del atentado que mató a otros cinco compañeros del Politécnico de Rosario que se encontraban en esa ciudad de Estados Unidos celebrando los 30 años de egresados. No estuvo presente Martín Marro, quien está internado como consecuencia de las heridas que sufrió en el atentado. "Aquí estamos, llenos de dolor. Cuesta entender, no hay forma de entender que se arrebaten vidas así", dijeron para hablar de la muerte de Adrián Erlij, Hernán Mendoza, Diego Angelini, Alejandro Pagnucco y Hernán Ferruchi. El gobernador Miguel Lifschitz llegará hoy a Nueva York junto al presidente Mauricio Macri y juntos participarán de un homenaje a las víctimas.
Con la conciencia plena de que serán para siempre los sobreviventes de una gran tragedia, el arquitecto Banchini fue el encargado de leer el texto que junto con sus amigos habían preparado.
"Si hay un lugar donde no hubiésemos querido estar es en este lugar. Si hay un texto que no hubiésemos querido escribir es este texto. Pero aquí estamos, llenos de dolor. Cuesta entender, no hay forma de entender que se arrebaten vidas así. Que un sueño se transforme en la peor pesadilla. El sentimiento es intransferible, no hay palabra que lo pueda contener. Duele como nunca había dolido. También es intransferible la experiencia por la que pasamos. Hemos sobrevivido y hemos visto partir a nuestros amigos", leyó Banchini.
"En qué se ha transformado el mundo. Cómo alguien puede pensar, planear y ejecutar un acto semejante. No nos entra en la cabeza. Y si hay algo que no queremos son más muertes. Ojalá se haga justicia. Ojalá no se vuelva a repetir ni aquí ni en ningún lugar del mundo", siguió el texto. "Sabemos que un periodista americano (Brian Winter) ha escrito una nota sobre nosotros, sobre nuestra amistad y sobre el profundo significado que tiene la amistad para los argentinos. Sabemos que esa nota tan emocionante se ha vuelto viral. Es verdad que nos alentaba un fuerte sentido de fraternidad. Es un rasgo de la cultura argentina, amistades fuertes, duraderas, tolerantes y solidarias. Llegamos hasta aquí empujados por ese sentimiento, que se había forjado en nuestra primera juventud, y nos acompañó siempre hasta ahora, que somos adultos, somos padres, somos esposos. Lloraremos por siempre a nuestros amigos. Fue el amor lo que nos trajo aquí y ese amor nos seguirá uniendo a ellos, a nosotros a nuestras familias. Eso fue, es y será nuestro camino".
