La producción nacional de vehículos se ubicó en octubre en 43.854 unidades, lo que representa un avance del 15,9 por ciento frente al mismo período del año pasado aunque implica una baja del 6,6 por ciento en relación a septiembre. El sector automotor, según los datos de Adefa, que agrupa a las terminales, acumula en el año una producción que supera en un 2,1 por ciento al período enero–octubre de 2016. El avance se explica por la tracción positiva que viene por el lado de las exportaciones, ya que las ventas de vehículos nacionales a concesionarios del mercado local acumula una baja del 9,5 por ciento en diez meses. Pero las ventas totales de los concesionarios entre enero y octubre registra un crecimiento del 27,8 por ciento. La diferencia entre la suba de ventas y caída de la entrega de modelos nacionales a las concesionarias se explica por las importaciones.
La fabricación de vehículos en el país alcanzó entre enero y octubre un total de 393.650 unidades, un avance de 2,1 por ciento interanual. El dato, de todas formas, se encuentra un 17 por ciento por debajo de los 462.791 de 2015. Los utilitarios explican el desempeño positivo del sector automotor en la comparación frente a 2016. El segmento de las picks-up en donde ya prácticamente todas las automotrices instaladas en el país tienen participación creció en octubre un 37,6 por ciento interanual, mientras que la fabricación de automóviles bajó un 5,3 por ciento. Del mismo modo, la producción de autos acumulada en diez meses muestra una merma del 15,4 por ciento al tiempo que los utilitarios registran un alza del 21,7 por ciento.
El desempeño desigual de las picks-up en relación a los autos responde a que los utilitarios tienen mejor inserción exportadora en América latina e incluso se venden en otras regiones. Según los datos de Adefa, las ventas al exterior de utilitarios crecieron un 67 por ciento en octubre frente al mismo mes de 2016, frente a un incremento del 21,3 por ciento en el caso de los autos. En diez meses, las exportaciones de utilitarios acumulan un alza del 41,8 por ciento frente a la baja del 25 por ciento de los autos.
El segmento de picks-up es liderado por la Hilux (Toyota), Amarok (Volkswagen) y la Ranger (Ford). También Renault, Nissan y Mercedes Benz planean en el corto plazo comenzar a producir utilitarios en el país. Por el contrario, el segmento de autos quedó muy atado a Brasil, que redujo su mercado. El 63,8 por ciento de las exportaciones totales en el año se dirigieron a Brasil, seguido por Centroamérica (8,7 por ciento), Perú y Chile (4,8) y México (4,7 por ciento). La participación de Brasil en las exportaciones se ubica varios escalones por debajo del peso promedio que tuvo en los últimos veinte años, en el orden del 85 por ciento de las ventas externas. Al mismo tiempo, las importaciones compiten en mayor medida con los autos que en el rubro de utilitarios.
El mayor ingreso de importados queda expuesto en la diferencia entre las ventas de vehículos nacionales a los concesionarios frente a las ventas totales a los concesionarios. La brecha también se observa al comparar con las ventas en el sector minorista que calcula Acara, entidad representante de los concesionarios. En octubre, las ventas totales de las terminales a los concesionarios llegaron a 74.416 unidades, lo que representa un avance interanual del 32 por ciento. Sin embargo, apenas 22.990 unidades fabricadas en el país se vendieron a las concesionarias, una baja del 2,5 por ciento frente al mismo período del año pasado. Esa diferencia también se replica en el período enero–octubre: las ventas totales de las terminales a los concesionarios acumulan 714.864 unidades, una suba del 21,8 por ciento. Pero los vehículos nacionales colocados al mercado mayorista local fueron 211.337, con una baja del 9,5 por ciento. Las terminales cubrieron el resto con modelos que trajeron del exterior, especialmente de Brasil y México. Los concesionarios, en tanto, informaron días atrás que en diez meses registran una suba de sus ventas del 27,8 por ciento interanual.