La diputada Elisa Carrió festejó en las redes sociales con una foto la detención del ex vicepresidente Amado Boudou. “¡viva la República!”, exclamó Carrió dese su cuenta de Twitter junto a la imagen de una virgen y la muñeca que ella misma llama “Republiquita” y usa en varias oportunidades para ridiculizar su propio discurso de defensa de las instituciones. Luego calificó al juez Ariel Lijo de “oportunista” y aseguró que la detención de Amado Boudou fue en respuesta a la denuncia contra el magistrado presentada esta semana en el Consejo de la Magistratura. Aunque la línea del Gobierno fue mostrar “sobriedad”, varios funcionarios se salieron del libreto oficial y festejaron.
“Es una decisión judicial”, dijo la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich. Fue la versión oficial que sostenían los funcionarios de primera línea, que incluso comunicaba cierta “sorpresa” oficial e intentaban despegarse del operativo mediático armado con fotos y filmaciones del arresto. Sin embargo, desde el juzgado de Lijo advirtieron ayer que el magistrado no ordenó la filmación y que era improbable que la Prefectura la difundiera a los medios de comunicación sin una orden del ministerio de Seguridad.
“celebro que haya una justicia que actúe de manera rápida, si se hubiera movido más rápido hace muchísimos años, la Argentina hubiera evitado muchos problemas”, afirmó el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne. “Ya no hay impunidad para nadie”, dijo el diputado Pablo Tonelli, quien también sostuvo que la Justicia está “actuando con independencia”.
El presidente provisional del Senado, Federico Pinedo, consideró que “es un punto bueno que se aplique la ley a todos por igual”, pero que a la vez siente “tristeza”. “Hay gente que se alegra con este tipo de noticias. En un punto es bueno que se aplique a la ley a todos por igual, pero a mí me da tristeza la detención de Amado Boudou”, dijo Pinedo.