Dos nuevos ataques de intimidación pública se registraron entre la noche del jueves y la mañana del viernes en establecimientos educativos. Un jardín de infantes de zona oeste y una escuela primaria de Constitución al 3200 fueron blanco de balaceras. En ambos lugares, los tiradores dejaron notas con mensajes que mencionan a la policía. Los episodios se suman a otros dos registrados en la escuela Richieri, de Moreno y San Luis, donde se encontraron notas amenazantes el martes y el miércoles. Crece la preocupación ante sucesos que ya tienen antecedente en meses anteriores. "Nos hace recordar situaciones muy complejas del año pasado", dijo Juan Pablo Casiello, de Amsafé Rosario, y preguntó ¿hasta cuándo las comunidades educativas vamos a ser víctimas de la violencia?". Desde el gremio advirtieron "sobre la posibilidad de que una vez más la política del desembarco de tropas federales estuviera fracasando".
Cinco disparos cometidos alrededor de las 23 del jueves generaron alarma en la zona de Felipe Moré al 2300. Al llegar personal policial constató dos impactos contra la fachada del Jardín Nº 209 "Noemí Fontana", levantó cuatro vainas servidas y halló una nota intimidatoria que dejaron los agresores en la puerta de la institución.
Desde Fiscalía indicaron que por testimonios se pudo saber que se trató de dos personas que se trasladaban en una moto; aunque vecinos relataron ver a un grupo de entre dos y cuatro, que pasaron a pie. Luego de las primeras medidas tomadas en el lugar, las clases se dictaron ayer con normalidad. "Se sigue sosteniendo que la escuela es el mejor lugar donde pueden estar nuestros niños, así que las puertas están abiertas. Queremos transmitir tranquilidad y decirles que desde el Ministerio de Seguridad y el Ministerio Público de la Acusación ya se están investigando estos hechos. Desde Educación tenemos una circular desde el primer momento que asumimos, que se transmitió a supervisores y supervisoras, con un teléfono SOS que se atiende las 24 horas para que den aviso y nosotros intervenimos con aviso a Seguridad", indicó en Canal 3 una representante de Educación provincial.
El segundo ataque tuvo lugar en Constitución al 3200, donde se hablaba de cuatro disparos contra el portón que recién fueron advertidos en la mañana del viernes, pero que habrían sido cometidos alrededor de la 1 de la madrugada contra la fachada de la escuela Nº 1.202 “Gendarmería Nacional”, donde ayer por la mañana estaban suspendidas las actividades. Aquí también se secuestró una nota con contenido similar al de la encontrada en el otro establecimiento, y que según trascendió mencionaba a una persona por presunta venta de droga y a la policía.
En tanto, desde el Ministerio de Seguridad indicaron que los operativos que se ponen en marcha luego de este tipo de situaciones "son los que se vienen haciendo a raíz de estos hechos, con patrulleros como los que están ahora en la zona", dijeron sobre el protocolo.
En las comunidades educativas la preocupación crece porque no es la primera vez que escuelas son utilizadas como el lugar elegido por las bandas para dejar mensajes. "En el caso de Richieri las notas hablaban de uso de armas"; y en los nuevos hechos apuntan al accionar de "grupos narco y complicidad policial", plantearon desde Amsafé Rosario. Casiello lamentó "niveles de violencia muy brutales" en ambos hechos, que generan "angustia y temor".
Al mismo tiempo, el gremio de docentes públicos expresó en un comunicado que "aunque desde las autoridades se pretenda tapar o minimizar estas situaciones, se trata de hechos gravísimos que no pueden dejar de preocuparnos muy seriamente. Advertimos sobre la posibilidad de que una vez más la política del desembarco de tropas federales estuviera fracasando. Volvemos a decir que el camino para acabar contra estas manifestaciones extremas de la violencia narco está en dar respuestas a las urgentes necesidades de la juventud y de toda la comunidad de los barrios y, por otro lado, en cortar los vínculos con estas bandas de distintos sectores del poder". Y finalizaron: "Abrazamos a las comunidades de estas instituciones educativas y comprometemos nuestro acompañamiento. Los gobiernos son responsables de la escalada de violencia y exigimos al Ministerio de Educación que garantice el cuidado de lxs alumnxs, lxs trabajadorxs y los edificios escolares".