El periodista y conductor de La Mañana, Víctor Hugo Morales, cuestionó en su editorial por la 750 al presidente Javier Milei luego de que se autoidentificara como alguien que “juega en otra liga” y aseguró que lo que queda es la acusación a sus propios ciudadanos de ser “de segunda”: “Y la mejor prueba de sus ínfulas es que lo votaron a él. Porque tenés que ser medio ciudadano de segunda, estar muy envenenado para votarlo a Milei”.
El editorial de Víctor Hugo Morales
Dice Milei que él juega en otra liga. El tipo ahora es internacional. ¿Y acá queda? Una Argentina de cabotaje.
En el fondo, Milei acusa de ciudadanos de segunda a los habitantes de su país. Y la mejor prueba de sus ínfulas es que lo votaron a él. Porque tenés que ser medio ciudadano de segunda, estar muy envenenado para votarlo a Milei. Porque vos veías lo que era el tipo.
Seis de cada diez envenenados lo votaron a él, que es de cuarta, y como decía Groucho Marx, "no debe ser muy decente este club que me acepta como socio". No debe ser otra cosa que país de cabotaje el que me elige como presidente.
Milei no sabe en su plena conciencia qué es lo que hace. Pero, como a Conan, algo le dice, quizás el olfato. El hueso es ser malo. En un mundo donde todos se pelean para ver quién es el más bueno, él quiere ser el más malo. Ese es el hueso.
Se lo tiran a España, corre y lo trae entre los dientes. Se lo tiran a Estados Unidos y allá va. Se ofrece a sus amos la misma gracia: dice "viva la libertad", da la patita, saca la lengua y mueve los ojitos con mucha gracia. Y nos deja virtualmente como ciudadanos de cabotaje porque él juega en otra liga.
"Discúlpenme... estoy en otra", dice Milei. "Caputo, fijate qué podés hacer con el peso, pero no lo pises, ya sabes por qué. Camina mirando la vereda". "Pettovello, matalos de hambre de una vez". "Francos, usted cualquier cosa...". "Lemoine, Marrita, y los otros, hagan lío, distraigan".
"Y yo, tengo un partido de la otra liga el lunes que me voy a Estados Unidos, pero me tienen en el Twitter, tranquilos", dice Milei.