La Sala III del Tribunal de Juicio presidida por la jueza Carolina Sanguedolce e integrada por Pablo Farah y María Gabriela González absolvió por la duda a Rita Coronel (35) del delito de homicidio calificado y ordenó su inmediata libertad.
En el juicio la mujer estuvo representada por el defensor público Jorge Bonetto, quien pidió la absolución por el beneficio de la duda. Había llegado a juicio acusada por un hecho ocurrido el 7 de junio de 2019 en una vivienda precaria de Villa Lavalle, donde un hombre falleció por intoxicación por monóxido de carbono y posterior calcinación en el contexto de un incendio.
El fiscal penal Ramiro Ramos Ossorio acusó a la mujer por homicidio calificado por alevosía en perjuicio de un hombre con el que tenía un vínculo cercano. La acusación refería que la acusada había aprovechado la situación de indefensión de la víctima, quien se encontraba inconsciente, para prenderle fuego a su habitación.
La mujer además llegó a juicio con otra causa acumulada, en la que también estaban siendo juzgados otros dos acusados. Se trataba de un hecho en el que una vecina de Villa Lavalle denunció que se encontraba en su casa durmiendo junto a su pareja cuando los acusados entraron por la fuerza para atacarlos. Dijo que su concubino huyó por la parte trasera y a ella la sujetaron, la amenazaron con un cuchillo, la sometieron a tocamientos y la obligaron a practicarle sexo oral a uno de los imputados. La semana pasada la fiscalía retiró las acusaciones por abuso sexual referidas a este hecho.
Pero el Tribunal no encontró elementos para quebrar el estado de inocencia de Coronel y la absolvió aplicando el beneficio de la duda. Los fundamentos de la sentencia se conocerán la semana próxima.
Cómo sucedió el hecho
En cuanto a la acusación por homicidio, en el juicio la hija del hombre fallecido contó que el 7 de junio de 2019 llegó a su casa por la tarde y al rato arribó su padre. Venía con Coronel pero ella se había quedado afuera. Dijo que le pareció raro porque, por la relación cercana que tenía con su padre la mujer siempre pasaba e incluso a veces se quedaba a dormir en un sillón del comedor.
La testigo siguió relatando que su padre comenzó a buscar algo, le preguntó qué era y le contó que había perdido 50 pesos y que Coronel estaba enojada por eso. Desde afuera, la mujer le gritó a su papá: “Acordate que el que ríe último ríe mejor”. Y se fue. El hombre se quedó en la casa y a la media hora Coronel volvió, él la hizo pasar y se fueron al fondo a jugar a las cartas.
La hija contó que el padre bebía alcohol y se embriagaba, pero ese día estaba lúcido y no tenía olor etílico. Señaló que la mujer sí tenía una botellita pero no sabía qué contenía.
Alrededor de las 22, su papá le avisó que acompañaría a su casa Coronel, que iba y volvía, y se llevó una vela porque la mujer no tenía luz.
Esta testigo manifestó que se acostó, dado que su padre a veces se quedaba a dormir en la vivienda de Coronel. Después se enteró de lo ocurrido porque un amigo de su padre le golpeó la ventana por la mañana y le contó acerca del incendio, fue al lugar, el fuego ya estaba apagado y había policías.
Por otra parte, un policía expuso que hizo un relevamiento vecinal en el lugar del hecho determinó que la vivienda siniestrada estaba abandonada y que Coronel solía reunirse allí con otras personas para consumir alcohol y estupefacientes.
El policía dijo que se entrevistó con un matrimonio al que la mujer recurrió para avisar del incendio. Indicó que el dueño de casa escuchó que desde afuera llamaban a su esposa, se acercó a la ventana y vio a Coronel, que le pidió que hablara a su mujer, sin decirle del siniestro, entonces llamó a su esposa y se fue a acostar nuevamente.
Según el informe policial, la vecina salió y Coronel le pidió ayuda. Le dijo que se habían dormido con la vela prendida. La vecina advirtió entonces la columna de humo que se elevaba desde el inmueble del frente. Le pidió a su esposo que llamara al Sistema de Emergencia 911 y se vistió para acompañar a la acusada hasta la vivienda en llamas.
La vecina contó que la joven entró primero y ella por detrás. Observó que Coronel buscaba algo, le preguntó qué pasaba y le dijo que buscaba a su amigo. La mujer entrevistada manifestó que se sorprendió porque antes no le había mencionado que ahí había otra persona. La acusada le dijo que no sabía si él había logrado salir. Fueron a la parte del fondo a buscarlo, sin resultado. Luego salieron porque el fuego ya había avanzado demasiado. La vecina volvió a llamar al 911 para alertar acerca de la presencia de una persona dentro de la casa que se incendiaba.