Los países garantes, la ONU y las instituciones que acompañan la mesa de diálogo entre el gobierno de Colombia y el Ejército de Liberación Nacional (ELN) celebraron la firma del primero de los seis puntos del Acuerdo de México, que contiene la agenda de las negociaciones de paz. Las partes se comprometieron el sábado a llevar a cabo un encuentro con las víctimas del conflicto armado para que presenten sus propuestas tras reunirse con representantes de movimientos y plataformas de víctimas integrantes del Comité Nacional de Participación (CNP).
"Reconocemos el compromiso y la determinación de los diversos actores involucrados en este esfuerzo quienes con su arduo trabajo y dedicación, marcan un hito en los procesos de paz en Colombia", apuntaron los seis países garantes (Brasil, Cuba, Chile, México, Noruega y Venezuela), la Conferencia Episcopal y el Representante Especial del Secretario General de las Naciones Unidas. "Esperamos que este importante logro permita a las partes seguir avanzando en la superación del conflicto armado interno", destacaron los firmantes.
"La voz de las víctimas es fundamental"
El gobierno de Gustavo Petro y la guerrilla del ELN firmaron este sábado el primer acuerdo de la agenda para la participación de la sociedad civil en el proceso de paz, el mayor avance hasta ahora en los diálogos que completan 18 meses de altibajos. "Sabemos que la paz no se construye con olvido e impunidad, y que la voz de las víctimas es fundamental en este proceso y la legitimidad de los acuerdos", dijeron delegados del gobierno colombiano y del ELN en un comunicado conjunto.
"Nos comprometemos a preparar y llevar a cabo un encuentro donde las víctimas del conflicto armado, de la violencia sociopolítica y estructural, de los territorios y poblaciones, presenten propuestas" para enriquecer el proceso de paz, agregó el documento. Pablo Beltrán, jefe de la delegación guerrillera, dijo durante el anuncio que el punto uno "busca que haya una gran alianza social y política, que vamos hacia un gran acuerdo nacional".
En mayo de 2023 la dirigencia del ELN, la más antigua de América latina, puso en pausa la mesa de diálogos después de acusar a Bogotá de implementar un proceso paralelo con un frente que no responde a las órdenes del denominado Comando Central del ELN en el departamento de Nariño. A mediados de abril las partes reanudaron el proceso tras una "reunión extraordinaria" en Caracas.
Sin embargo el 6 de mayo el ELN anunció que retomará los secuestros, alegando que el gobierno de Petro incumplió su compromiso de entregarle donaciones de la comunidad internacional. Pese al avance de este sábado, la reanudación de los secuestros sigue siendo un punto crítico para un proceso de paz entre ambos bandos, que dialogan desde fines de 2022 en Caracas, Ciudad de México y La Habana como sedes rotativas.