El gobierno nacional ultima los detalles del cargo a medida que le dedicará a Federico Sturzenegger, uno de los principales ideólogos de la desregulación total de la economía que desde diciembre pasado hace estragos en el aparato productivo y las condiciones reales de vida de la población.

El nombre que resuena para la cartera ad hoc que se le creará a la exmano derecha de Domingo Cavallo es el de “Modernización Económica”, un híbrido de alta influencia los principales ministerios sacudidos tras el movimiento de fichas en la Jefatura de Gabinete.

Ya lo había anticipado el presidente Javier Milei la semana pasada: “Entra Federico Sturzenegger como ministro. Es un caso de 2+2 es 4”. En ese momento, el nombramiento estuvo condicionado a la aprobación de la Ley Bases, pero el fin de semana patrio de fracasos, peleas y disputas de poder en la mesa chica del gobierno precipitaron el anuncio.

Esta mañana el flamante Jefe de Gabinete, Guillermo Francos, ratificó la inminente llegada de Sturzenegger. Dijo que Milei "quiere incorporar al Gabinete una persona que sea capaz de analizar la regulación argentina y discutir con todos los miembros del Gabinete su visión sobre lo que tiene que ser el proceso de simplificación y desregulación de nuestra compleja normativa pública".

Sturzenegger tendrá en breve el poder formal que tuvo de manera informal como principal asesor de Milei, una suerte de Niccolò Maquiavello que sugiere en el oído del Presidente y que fue ganando posiciones en pocos meses como líbero y estratega.

Desde donde esté hará valer su rol de ideólogo del Decreto 70/2023 de desregulación de la economía y de articulador, armador, redactor y empaquetador de la Ley Ómnibus, cuya aprobación sigue naufragando pero resiste en el Congreso.

El historial de Sturzenegger

La llegada de Sturzenegger al Gabinete de La Libertad Avanza (LLA) genera tanta ansiedad como la llegada de Domingo Cavallo al gobierno de la Alianza. Al entonces “superministro” se le atribuía la capacidad de tener en su cabeza la totalidad de un plan que salvaría al país del monstruo que él mismo había creado, el 1 a 1. Fue echado el recordado 19 de diciembre de 2001.

Por esos días –en rigor hasta noviembre de 2001, antes de que explotara todo- Sturzenegger era el secretario de Política Económica de Fernando de la Rúa. Fue el artífice de los ajustes a jubilados y trabajadores públicos, del Blindaje, del Megacanje y de cada una de las medidas que condujeron hacia el definitivo corralito financiero, con confiscación de ahorros, default y estallido a fin de año.

Pero desde antes, como mano derecha de Cavallo, fue la personificación de un gobierno de tecnócratas ultraconservadores ligados al establishmet internacional, que trabajó durante el menemismo para el achicamiento del Estado, privatizaciones de empresas públicas, quita de derechos laborales, ajustes y más ajustes.

En 2015 volvió a la función pública de la mano de Mauricio Macri, quien lo nombró al frente del Banco Central. Allí quedó en el recuerdo por sus famosas metas de inflación con tipo de cambio flotante, que proyectó para el año 2018 un "10% (+ - 2%)". Hacia diciembre de 2017, la meta inflacionaria se había corregido a 15% y 2018 finalizó con una suba de precios del 47,6%, para entonces la cifra más alta en 27 años.