La diputada nacional Gisela Marziotta presentó en las últimas horas un proyecto para exigirle al Gobierno nacional que garantice el financiamiento de los Juegos Nacionales Evita, mediante la adecuación de las partidas presupuestarias, según lo establecido en la ley 26.462.
“Los Juegos Evita representan lo mejor del deporte, la inclusión, el federalismo y la juventud. Son un derecho clave para los y las jóvenes, pero también para las personas mayores y para personas con discapacidad. No podemos permitir que se los arrebaten”, sostuvo Marziotta.
“La propuesta del Gobierno es simplemente su eliminación”, subrayó la diputada de Unión por la Patria, al referirse a la idea del Ejecutivo de organizar “Juegos de Alto Rendimiento”, una propuesta totalmente distinta.
“Los Juegos Nacionales Evita son una política de Estado que trascendió a distintos gobiernos, promueven la competencia deportiva y la inclusión en cada rincón de la patria. El año pasado, por ejemplo, participaron más de un millón de personas”, señaló al respecto Marziotta.
La competencia fue creada en 1948 por el presidente Juan Domingo Perón bajo el nombre de Juegos Infantiles Evita, pensados como una herramienta de inclusión y promoción social: por primera vez chicos y chicas de todo el país pudieron acceder al deporte y a la salud, a través de revisaciones médicas. La iniciativa fue de la propia Eva Perón y del entonces ministro de Salud, Ramón Carrillo.
Pero estos juegos no fueron ajenos a la violencia política del siglo XX, y fueron interrumpidos en el golpe de Estado de 1955. En 1973, durante el tercer gobierno de Perón, se volvieron a poner en marcha y entre sus participantes estuvo nada menos que Diego Armando Maradona con “Los Cebollitas”. La dictadura iniciada el 24 de marzo de 1976 volvió a cancelarlos. Ya en democracia, los Juegos volvieron a organizarse en 1991 y 1992, pero no se continuaron.
En 2003, el presidente Néstor Kirchner recuperó la iniciativa para buscar que se garantice el deporte y la recreación, con la incorporación de nuevas categorías, deportes y disciplinas, como también expresiones culturales. Además, se incorporaron entonces a deportistas paralímpicos y a adultos mayores. En 2008, durante la presidencia de Cristina Fernandez de Kirchner, los Juegos Nacionales Evita quedaron establecidos mediante la Ley 26.462.
“Una vez más, el gobierno de Javier Milei busca destruir una instancia colectiva, en este caso relacionada al deporte, que es un valor fundamental de nuestra sociedad porque se promueve la vida sana, el trabajo en equipo, la responsabilidad y la vida por fuera de las pantallas”, advirtió Marziotta.